Un preso fugado decide regresar a la cárcel porque en la calle no se sentía libre

Crescencio Pérez Zárraga, el preso preventivo de 25 años de edad que hace una semana se fugó de Hospital de Navarra descolgándo se con unas sábanas por la ventana de su habitación, situada en la tercera planta del edificio, se presentó voluntariamente el pasado lunes en la prisión provincial de Pamplona.Según dijo al entrar de nuevo en el recinto carcelario, volvió porque en la calle no podía moverse con libertad debido a la intensa búsqueda por parte de la policía. Crescencio Pérez se encuentra actualmente internado en la enfermería, del centro penitenciario, y se recupera de la intervención ...

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Crescencio Pérez Zárraga, el preso preventivo de 25 años de edad que hace una semana se fugó de Hospital de Navarra descolgándo se con unas sábanas por la ventana de su habitación, situada en la tercera planta del edificio, se presentó voluntariamente el pasado lunes en la prisión provincial de Pamplona.Según dijo al entrar de nuevo en el recinto carcelario, volvió porque en la calle no podía moverse con libertad debido a la intensa búsqueda por parte de la policía. Crescencio Pérez se encuentra actualmente internado en la enfermería, del centro penitenciario, y se recupera de la intervención quirúrgica a que fue sometido en el hospital.

El pasado 23 de mayo, justamente un día después de su detención por la policía, este recluso protagonizó una espectacular fuga del Hospital de Navarra, donde había sido intervenido quirúrgicamente con objeto de extraerle dos cucharas de metal que había ingerido.

Crescencio Pérez planeó meticulosamente la fuga del centro sanitario y durante las horas anteriores a su huida simuló tener una fuerte descomposición, lo que le permitía, sin levantar sospechas, ir continuamente al baño de la habitación y preparar su marcha por una de las ventanas del servicio.

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