Tribuna:TRIBUNA LIBRE / POLÉMICA SOBRE EL BOXEO

No es para tanto

Tampoco ye pa ponese así es una frase muy asturiana que usábamos de niños cuando alguno se remontaba desproporcionando la reacción por un fútil pretexto o una apenas inexistente oposición, abría la caja de Pandora y fulminaba al adversario, que quedaba, las más de las veces, pasmado ante tan desorbitada réplica.El alcalde de Oviedo, no sé si pasándose de listo o pasándose de tonto, trata de convertir las votaciones que le resultan adversas en grandes batallas, episodio de universales guerras.

Y no es para ponerse así, señor alcalde, que la oposición lo que ha pretendido en...

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Tampoco ye pa ponese así es una frase muy asturiana que usábamos de niños cuando alguno se remontaba desproporcionando la reacción por un fútil pretexto o una apenas inexistente oposición, abría la caja de Pandora y fulminaba al adversario, que quedaba, las más de las veces, pasmado ante tan desorbitada réplica.El alcalde de Oviedo, no sé si pasándose de listo o pasándose de tonto, trata de convertir las votaciones que le resultan adversas en grandes batallas, episodio de universales guerras.

Y no es para ponerse así, señor alcalde, que la oposición lo que ha pretendido en ésta por usted llamada batalla del boxeo, como antes la del fútbol, como en otras que a buen seguro se producirán, lo único que ha querido demostrarle es algo que usted no quiere o no puede comprender, y es reconocer que su pretendida victoria en las urnas es, si no pírrica, al menos precaria. Que esa mayoría de la que alardea no existe más que en sus deseos, puesto que la composición del Ayuntamiento de Oviedo es: 13 concejales del PSOE, 13 concejales del Grupo Popular y 1 concejal del PC. Y, por tanto, lo que le decimos a usted una y otra vez, apoyados en las matemáticas es que 13 no son más que 13 y que 13 no son menos que 13. Así de fácil. Y usted, sin comprenderlo.

Y las derrotas, sus derrotas, señor alcalde, no son del fútbol, ni del boxeo, que no le es dado a usted pontificar sobre los gozos o las sombras de un deporte. Que un alcalde no es más que alcalde y no llega a ministro de Cultura, aunque usted haya sido alevín de lo mismo.

No se discute en el pleno el cambio moral del deporte y de la sociedad. No nos lleve al terreno megalomaníaco en que le gusta jugar y baje a la humilde arena de lo municipal.

El recurso, que no batalla, que usted ha perdido era, simple y llanamente, que le queríamos convencer de que no es competencia suya ni de la fundación deportiva municipal prohibir el deporte.

Como no es competencia suya y va a perder otra batalla: la de exonerar de pago de tasas, como hizo. Aunque temo nos venga con anatemas sobre persecución a la cultura, al folklore o quién sabe qué. Y, posiblemente, tenga otra derrota cuando le diga a usted el pleno o el tribunal correspondiente que está fuera de sus atribuciones entregar el uso y disfruté de un local municipal a una asociación. Aunque temo que nos venga otra vez con acusaciones sobre veto a la participación ciudadana o a los derechos constitucionales.

Yo no hago citas de Pitágoras -vía G. Bueno-, ni de Homero, ni siquiera del barón de Coubertin. Tampoco me convierto, como usted hace, en inquisidor de conciencias de compañeros concejales, de los que dice son extraordinarias personas, pero a los que amenaza con la condenación eterna.

Batallitas

Yo le rogaría que cuando los concejales nombrados del PC o del PDP, o los innominados de GP, no voten como usted quiere, se sienta misericordioso y se mantenga en esa prometida "espera de brazos abiertos, aun cuando no se produzca la revisión de sus posiciones, aunque no estén a la altura de categoría y convicciones".Asombrosa su modestia" usted que se considera públicamente padre espiritual de concejales de "cerrilismo inconcebible", y su afán de notoriedad, llevando a las páginas de EL PAÍS sus batallitas.

Siga usted, si así lo quiere, siendo de los pocos que aplauden a su amigo el ministro por el decreto defenestrador de presidentes; siga jugando a ser defensor de grandes causas, que antecedentes tiene en tan gloriosas defensas; nosotros seguiremos limitados al ámbito de las leyes de Administración local, marco mínimo y humilde, pero único que a usted y a nosotros nos compete. Jugar fuera de esa área es estar en off-side.

Lo dicho, señor alcalde. Perder una votación, o más de una, y aunque sean 10, tampoco ye pa ponese así. No gaste en fuegos artificiales, para deslumbrar no sé a quién, y dedíquese a las labores propias de su cargo de alcalde: municipales, modestas..., pero eficaces y prácticas. No vaya más allá de las atribuciones que como tal alcalde le fueron conferidas y no dé cuartos al pregonero por todos los medios de comunicación: Prensa, radio y televisión local y Prensa nacional, que poco ha de importarle al país hispano su cruzada particular "contra espectáculos pleistocénicos de consecuencias letales y tufillo de explotación humana y de amoralidad mafiosa estilo Chicago años treinta". Perdóneme que no haya podido dejar de reproducir una de sus frases que me resultó alucinante.

Espero que, pese a sus augurios catastrofistas, la guerra no se esté iniciando y quede todo en disparidad de criterios sencillamente manifestados y aceptados, si nos son contrarios, con el más generoso espíritu democrático que para usted deseo.

Luis Riera Posada es abogado y portavoz del Grupo Popular municipal.

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