"No se puede matar al enemigo sólo porque lo sea" dicen los obispos Cirarda y Setién

Los obispos de Pamplona, José María Cirarda, y San Sebastián, José María Setién, consideran la muerte de cuatro presuntos miembros de los Comandos Autónomos Anticapitalistas, en Pasajes de San Juan, "un acto más especialmente grave, en la cruel espiral de violencia que ensangrienta toda Euskalerría desde hace muchos años". "No se puede matar al enemigo sólo porque lo sea", agregan.Los obispos de Pamplona y San Sebastián, en una carta dada a conocer ayer y que lleva por título ¡Dejad de matar! ¡Construid la vida!, afirman que la muerte de estas cuatro personas "ha conmovido hondamente a ...

Los obispos de Pamplona, José María Cirarda, y San Sebastián, José María Setién, consideran la muerte de cuatro presuntos miembros de los Comandos Autónomos Anticapitalistas, en Pasajes de San Juan, "un acto más especialmente grave, en la cruel espiral de violencia que ensangrienta toda Euskalerría desde hace muchos años". "No se puede matar al enemigo sólo porque lo sea", agregan.Los obispos de Pamplona y San Sebastián, en una carta dada a conocer ayer y que lleva por título ¡Dejad de matar! ¡Construid la vida!, afirman que la muerte de estas cuatro personas "ha conmovido hondamente a nuestro pueblo". "Y la conmoción es tanto mayor cuanto que la información sobre el drama es confusa", añaden. "Todo se agrava más todavía", continúan, "porque, a las pocas horas de este doloroso acontecimiento, otro guipuzcoano ha sido muerto en Biarritz, y unos guardias han sufrido un atentado en Igueldo".

En su pastoral, los dos prelados recuerdan que sólo Dios es el dueño de la vida, y nadie puede disponer de ella "sólo porque ello sea eficaz". "Sólo cuando está en peligro la propia vida", recalcan, "es lícito poner en peligro la ajena. No se puede matar al enemigo sólo porque lo sea. Esto vale para quienes utilizan la muerte al servicio de sus propósitos políticos. También la legítima defensa de la sociedad tiene sus límites en el momento de buscar los medios de asegurarla". "Tenemos horror", concluyen, "a una sociedad sin valores éticos".