El director de El Prat confirma el aborto de un despegue por estar aterrizando otro avión

El director del aeropuerto de El Prat, Moisés Valdesogo, confirmó ayer que la torre de control había ordenado el martes pasado al comandante del DC-9 en vuelo Iberia-583, de Barcelona a Sevilla, que abortara el despegue. El avión rodaba a 70 millas por hora, por la pista 07, la de Castelldefels, paralela al mar. El aborto se decidió ante la presencia de otro avión, un Boeing 727, en vuelo Iberia-493, de París a Barcelona y Palma de Mallorca, que iba a aterrizar. Valdesogo calificó esta decisión de los controladores de "perfectamente normal".

Aunque Valdesogo, basándose en la transcripci...

El director del aeropuerto de El Prat, Moisés Valdesogo, confirmó ayer que la torre de control había ordenado el martes pasado al comandante del DC-9 en vuelo Iberia-583, de Barcelona a Sevilla, que abortara el despegue. El avión rodaba a 70 millas por hora, por la pista 07, la de Castelldefels, paralela al mar. El aborto se decidió ante la presencia de otro avión, un Boeing 727, en vuelo Iberia-493, de París a Barcelona y Palma de Mallorca, que iba a aterrizar. Valdesogo calificó esta decisión de los controladores de "perfectamente normal".

Aunque Valdesogo, basándose en la transcripción de las cintas que registran las conversaciones torre-avión, en las fases de salida y toma de tierra, negó rotundamente que del Boeing abortara a su vez el aterrizaje, un pasajero de ese aparato aseguró a EL PAIS que el comandante había efectuado una brusca maniobra muy cerca de la pista 02 (el viento permitió el martes tener dos pistas en servicio), por la que iba a tomar tierra, acelerando los motores y elevándose de nuevo, al comprobar que otro aparato estaba despegando.El director del aeropuerto barcelonés aseguró que cuando el vuelo Iberia-493 recibió autorización para aterrizar, el piloto la confirmó, despidiéndose con un "adiós". "No se recibió ninguna comunicación más", afirmó Valdesogo. La versión del pasajero, sin embargo, indica lo contrario: "Entramos por el mar. Cuando tomábamos la curva, para enfilar la pista, en diagonal a la costa, en el momento de ladear ví perfectamente un avión de Iberia parado en la cabecera de pista. Al acercarnos se puso en marcha y tomó velocidad para despegar. Pero seguíamos hacia abajo; no entendía cómo el piloto no lo veía. Cuando ya distinguíamos la pista, el piloto aceleró bruscamente y nos elevamos. Dimos otra vuelta y aterrizamos. La tripulación no nos dio una explicación y las azafatas comentaron: 'No sé qué nos ha pasado'. Al comentárselo yo, me respondieron: 'De buena nos hemos salvado'". El avión transportaba un centenar de personas, al igual que el DC-9.

Este nuevo dato del incidente también está siendo investigado.

Portavoces del Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (SEPLA) indicaron ayer a, este diario que no tenían conocimiento de problemas en el aeropuerto de Barcelona. "Ningún piloto se ha puesto en contacto con nosotros; no nos consta este incidente".

El SEPLA no abrirá una investigación oficial, "a no ser que las iniciadas por Aviación Civil nos obligue a ello". Oficiosamente, tratarán de conocer la versión del piloto del DC-9, cuyo nombre alegaron desconocer.