El Consejo Escolar y el control del Estado en los centros concertados, temas conflictivos en el debate sobre la LODE

"La Ley Orgánica del Derecho a la Educación (LODE) no implica autogestión, sino cogestión, que es sinónimo de paeticipación". "Para el propio ministro José María Maravall, participación es sinónimo de intervención". Estas dos frases, pronunciadas ayer en el pleno del Congreso de los Diputados que debate el proyecto de LODE, la primera del diputado socialista Íñigo Aguirre y la segunda del portavoz del Grupo Popular, Óscar Alzaga, resumen las distintas concepciones que el partido en el Gobierno, y el primer grupo de la oposición tienen sobre el papel que debe desempeñar el Consejo Escolar y el ...

"La Ley Orgánica del Derecho a la Educación (LODE) no implica autogestión, sino cogestión, que es sinónimo de paeticipación". "Para el propio ministro José María Maravall, participación es sinónimo de intervención". Estas dos frases, pronunciadas ayer en el pleno del Congreso de los Diputados que debate el proyecto de LODE, la primera del diputado socialista Íñigo Aguirre y la segunda del portavoz del Grupo Popular, Óscar Alzaga, resumen las distintas concepciones que el partido en el Gobierno, y el primer grupo de la oposición tienen sobre el papel que debe desempeñar el Consejo Escolar y el control del Estado en los centros concertados, uno de los temas claves de este proyecto de ley.

A lo largo de la jornada parlamentaria de ayer se debatieron dos importantes títulos de la LODE: el tercero, referente a los órganos de Gobierno de los centros públicos, y el cuarto, sobre los centros concertados; es decir, aquellas escuelas de titularidad privada -religiosa en la mayoría de los casos- y sostenidas al cien por cien con fondos públicos.Sólo un artículo del título cuarto, el 50, referente a la cuantía económica global. que deben recibir del Estado dichos centros y determinador de quién paga los salarios, si el Estado o el titular jurídico, -según la LODE, el Estado-, quedó apartado hasta el próximo lunes.

El título tercero fue aprobado ayer sin cambiar ni una coma con respecto al dictamen de la comisión. El cuarto, el de los centros concertados, registró algunos cambios, si bien la votación que, gracias al consenso entre el Grupo Socialista y la Minoría Catalana, los refrendará, quedó también aplazada hasta el lunes. Estos cambios se refieren a que cuando exista conflicto entre el propietario del centro y el Consejo Escolar -tanto en lo que se refiere a la selección de profesores cuando se producen vacantes, como al cumplimiento por parte del titular del régimen de participación que se establece en la LODE- una comisión de conciliación actuará con mayor rapidez, a fin de intentar solucionar el litigio.

El Grupo Popular no pudo sacar adelante su pretensión de que los centros concertados se financien a través del denominado cheque escolar, fórmula ésta que permite que la escuela, en función del número de alumnos, y a tenor de lo que cuesta cada plaza escolar, pida al Estado la cantidad total para invertir enseñanza gratuita. Actualmente se rigen por ese sistema los cursos de segundo grado de Formación Profesional.

Sin embargo, el Ministerit5 de Educación entiende que puede originar cierto tipo de fraude: bien porque se matriculen alumnos a la vez en Formación Profesional y en Enseñanza General Básica, como ya ha ocurrido en algunos centros, o bien porque por el afán de recibir del Estado la mayor cantidad posible de dinero se pueda caer en la tentación de no ser todo lo riguroso que cabría esperarse, en algunos casos, a la hora de conceder aprobados.

La admisión de los alumnos en los centros concertados se regirá por los criterios de situación económica de los padres, proximidad domiciliaria y tener más hermanos en el centro. Durante el debate sobre las funciones del Consejo Escolar, el socialista Victorino Mayoral dijo que éste no significaba autogestión, como dice el Grupo Popular, sino gestión compartida, que es sinónimo de Participación. En cambio, Óscar Alzaga calificó las enmiendas que se están aceptando en la LODE como "hojas de parra para las vergüenzas jurídico-políticas de esta ley".