18 federaciones registraron informes negativos en las auditorías correspondientes al ejercicio, de 1982

18 federaciones nacionales volvieron a dar informes negativos en sus auditorías correspondientes al ejercicio de 1982. En ningún caso, según las fuentes consultadas, los errores advertidos en estas federaciones son comparables a la de fútbol. La intervención General del Estado realiza una auditoría a esta federación en la actualidad por mandato del Gobierno, trabajo en el que se ha encontrado con algunas obstrucciones por parte del equipo que preside Pablo Porta, hecho que propició dos serias advertencias. Automovilismo, Ciclismo, Colombicultura, Deportes de Invierno, Galgos, Gimnasia, Hípica,...

18 federaciones nacionales volvieron a dar informes negativos en sus auditorías correspondientes al ejercicio de 1982. En ningún caso, según las fuentes consultadas, los errores advertidos en estas federaciones son comparables a la de fútbol. La intervención General del Estado realiza una auditoría a esta federación en la actualidad por mandato del Gobierno, trabajo en el que se ha encontrado con algunas obstrucciones por parte del equipo que preside Pablo Porta, hecho que propició dos serias advertencias. Automovilismo, Ciclismo, Colombicultura, Deportes de Invierno, Galgos, Gimnasia, Hípica, Tenis de Mesa, Voleibol y Fútbol recibieron un dictamen de "abstención de opinión", mientras que Billar, Boxeo, Halterofilia, Judo, Motociclismo, Salvamento y Socorrismo, Tiro de Pichón y Vela registraron resoluciones "negativas".

Tras la experiencia de estos años, y por los defectos observados, el Consejo Superior de Deportes solicitará un tipo de auditoría más completo del hasta ahora existente. Se trata de auditorías operativas. Cuatro federaciones, Voleibol, Vela, Gimnasia y Deportes de Invierno, por sobrepasar los 100 millones de presupuesto, serán revisadas por la Intervención General del Estado, como sucede actualmente con la de fútbol. El gasto de las auditorías en 1983 será de 39 millones.El resultado de las realizadas este año ha dado lugar a algunas sorpresas. Entre ellas, que federaciones con un pasado limpio se hayan visto ante la desagradable noticia de que su contabilidad era defectuosa. Ello, al parecer, se debe a que los censores no han actuado con los mismo criterios, razón por la cual para el próximo año se implantará un Plan General Contable.

Sólo con la Federación Española de Fútbol se ha tomado una decisión como era el del control de la subvención, no la suspensión de la misma. como era lo procedente, pero esta decisión no se ha extendido sobre las demás. El argumento que utiliza el CSD es el de que las irregularidades observadas en el fútbol no son comparables a todas los demás federaciones. Incluso, la desproporción es evidente si se tiene en cuenta que la federación que preside Pablo Porta maneja, entre subvenciones e ingresos propios, una cifra muy superior a los 2.000 millones, diez veces más que la segunda federación en presupuesto, como es la de Atletismo. Sin embargo, habrá quien piense que no se ha obrado con equidad aunque en el CSD esperan el resultado de la Intervención General del Estado para adoptar decisiones con respecto a las demás.

A la vista de la experiencia de cuatro años, el CSD sigue sin contar con un elemento idóneo que le permita conocer el mundo federativo. Los errores más frecuentes se resumen en deficiencias fiscales, falta de criterios, defectos en los libros, justificantes mal presentados y escaso reflejo del patrimonio total.