15 cooperativas no participan en la elección del consejo de la Caja Rural de Santander

Quince de las 34 cooperativas socias de la Caja Rural de Santander no podrán participar en la elección del consejo rector de ésta en la asamblea general que deberá celebrarse en el presente mes.Las citadas cooperativas han sido dadas de baja en el registro correspondiente del Ministerio de Trabajo, tras la inspección llevada a cabo por el citado ministerio, y que determinó se trataban de sociedades fantasmas creadas o utilizadas para cubrir algunas de las irregularidades cometidas por los anteriores gestores de la entidad cesados en febrero de 1981.

Sin embargo, y a pesar de cons...

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Quince de las 34 cooperativas socias de la Caja Rural de Santander no podrán participar en la elección del consejo rector de ésta en la asamblea general que deberá celebrarse en el presente mes.Las citadas cooperativas han sido dadas de baja en el registro correspondiente del Ministerio de Trabajo, tras la inspección llevada a cabo por el citado ministerio, y que determinó se trataban de sociedades fantasmas creadas o utilizadas para cubrir algunas de las irregularidades cometidas por los anteriores gestores de la entidad cesados en febrero de 1981.

Sin embargo, y a pesar de considerar como positiva la actitud del Ministerio de Trabajo en relación con el mundo cooperativo de Cantabria, fuentes del PSOE y organizaciones ganaderas consideran insuficiente la limpieza llevada a cabo.

"No estamos convencidos de que las cosas se estén haciendo bien; nos parece", precisa Juan González Bedoya, senador y portavoz socialista en el Parlamento regional, "que no hay demasiado interés en solucionar el problema, y de mantenerse así las cosas, a la asamblea asistirán cooperativas inexistentes o claramente inmersas en la corrupción de la etapa anterior".

La importancia de la celebración de la asamblea general viene determinada porque en ella se designarán a los nuevos consejeros que deberán hacer frente a la difícil situación dejada por el anterior consejo y el director general, Tomás Mier.

En 1982, con la caja rural intervenida por el Consorcio Nacional desde febrero del año anterior, las pérdidas fueron de 438 millones de pesetas, que vienen, a sumarse a los más de 1.400 millones de incobrables y fallidos existentes.

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