Disminuye ligeramente el número de poblaciones en alarma roja a consecuencia de la sequía
221 poblaciones -cuatro menos que la semana anterior-, con 236.961 habitantes, se encuentran en alarma roja a causa de la sequía, según informó ayer la Dirección General de Protección Civil. 33 de estas poblaciones, con 25.964 habitantes, necesitan abastacerse de agua por cisternas, y el resto tiene restricciones en el suministro.Las provincias más afectadas son Badajoz, Cáceres, Ciudad Real, Granada, Sevilla, Huelva, Toledo y Teruel. El nivel de los embalses se encuentra, muy bajo en Badajoz, con el 8,9% de su capacidad; Córdoba, al 20,51%; Sevilla, 27,7%, y Teruel, al 42,88%. En las demás zo...
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221 poblaciones -cuatro menos que la semana anterior-, con 236.961 habitantes, se encuentran en alarma roja a causa de la sequía, según informó ayer la Dirección General de Protección Civil. 33 de estas poblaciones, con 25.964 habitantes, necesitan abastacerse de agua por cisternas, y el resto tiene restricciones en el suministro.Las provincias más afectadas son Badajoz, Cáceres, Ciudad Real, Granada, Sevilla, Huelva, Toledo y Teruel. El nivel de los embalses se encuentra, muy bajo en Badajoz, con el 8,9% de su capacidad; Córdoba, al 20,51%; Sevilla, 27,7%, y Teruel, al 42,88%. En las demás zonas se supera el 50% de la capacidad.
En León sobra
En la provincia de León, la prolongación de la temporada de lluvias y la abundancia de nieve en las montañas han obligado a la Confederación Hidrográfica del Duero a soltar gran parte del agua almacenada por los grandes embalses, hasta el punto de que sólo en uno de ellos (Barrios de Luna) han tenido que turbinarse para producción de energía eléctrica más de 125 millones de metros cúbicos por encima de lo habitual en lo que va de año. A esta cifra hay que añadir otros 95 millones en el pantano de Porma y cinco millones en el de Villameca, informa Antonio Núñez.El volumen de agua recogido en los tres principales embalses de León es actualmente de 550 millones de metros cúbicos, casi un 35% más que en 1982. Según fuentes de la Confederación, el nivel actual de los embalses debe considerarse sólo como ligeramente superior al normal.