La cordada murciana, a 360 metros de la cima del Naranjo

La cordada murciana, integrada por los montañeros José Luis García Gallego y Miguel Angel Diez Vives, que intentan abrir una nueva vía en el Naranjo de Bulnes, ha podido escalar algunos metros más después de permanecer inactivos catorce días a causa de las tormentas de nieve y viento que han azotado los Picos de Europa.En la actualidad llevan 39 días en la pared, están a 260 metros de altura y a unos 360 de la cumbre, que alcanzarán, si el tiempo es favorable, en quince días. En breve perderán el, contacto físico con la cordada de apoyo.

El miércoles fue el último día que pudieron a...

La cordada murciana, integrada por los montañeros José Luis García Gallego y Miguel Angel Diez Vives, que intentan abrir una nueva vía en el Naranjo de Bulnes, ha podido escalar algunos metros más después de permanecer inactivos catorce días a causa de las tormentas de nieve y viento que han azotado los Picos de Europa.En la actualidad llevan 39 días en la pared, están a 260 metros de altura y a unos 360 de la cumbre, que alcanzarán, si el tiempo es favorable, en quince días. En breve perderán el, contacto físico con la cordada de apoyo.

El miércoles fue el último día que pudieron ascender. Izaron la hamaca hasta los 260 metros y se instalaron en un lugar estratégico, según palabras de José Luis, desde el cual, a partir de unos cincuenta metros más de altura, podrán ascender con mayor rapidez. El estado físico de los montañeros es bueno, aunque se encuentran algo cansados, lo que atribuyen a que en todo el tiempo que llevan en la pared sólo han bebido un litro y medio de agua diario, y a que durante los últimos días apenas pudieron dormir en la hamaca a causa del viento y el frío. La tempestad incluso les hizo perder contacto con la cordada de apoyo.

Actualmente la pared se encuentra en buenas condiciones, y tienen el proyecto de seguir escalando incluso con mal tiempo, ya que, aunque hace frío, no hay viento. La previsión meteorológica les anuncia una borrasca hasta el próximo lunes, y después tendrán tres o cuatro días de buen tiempo. Dos miembros de la cordada de apoyo, que se encuentran en Arenas de Cabrales, intentarán llegar como sea, a pesar del peligro de avalanchas, hasta el refugio de Urriello. ya que en pocos días -quizá hoy mismo si han seguido escalando- los escaladores perderán el contacto físico con la cordada de apoyo, debiendo transportar ellos mismos los alimentos y el agua. A partir de entonces todo el contacto con el exterior dependerá de sus conexiones por radio por medio de Nacho Torre, el radioaficionado de Llanes, cuya ayuda está siendo de vital importancia, ya que, a parte del apoyo que les presta, les mantiene en contacto con sus familiares, amigos e, incluso, admiradores.