Una tormenta crea problemas a la cordada del Naranjo

Los montañeros murcianos que intentan abrir unanueva vía en la cara oeste del Naranjo de Bulnes han podido superar el problema que se les presentó al romperse la protección de la hamaca en la que duermen, cambiándola por una nueva. Gracias a ello están soportando el fuerte temporal que azota los Picos de Europa. Su estado físico es bueno y, por el momento, no piensan abandonar. Actualmente están a 210 metros de altura y el descenso es imposible, pudiendo salir solamente por la cumbre.

Una piedra, desprendida de la pared, cayó sobre la hamaca en la que pasan las noches Jose Luis García G...

Los montañeros murcianos que intentan abrir unanueva vía en la cara oeste del Naranjo de Bulnes han podido superar el problema que se les presentó al romperse la protección de la hamaca en la que duermen, cambiándola por una nueva. Gracias a ello están soportando el fuerte temporal que azota los Picos de Europa. Su estado físico es bueno y, por el momento, no piensan abandonar. Actualmente están a 210 metros de altura y el descenso es imposible, pudiendo salir solamente por la cumbre.

Una piedra, desprendida de la pared, cayó sobre la hamaca en la que pasan las noches Jose Luis García Gallego y Miguel Angel Díez Vives, rompiendo la protección de goretex de la misma. Este hecho constituyó un gran problema dado que una fuerte borrasca de nieve y viento del norte está azotando la pared. En la mañana del jueves, los dos montañeros estuvieron fuera de la hamaca cambiando la protección rota por una nueva. Debieron permanecer a la intemperie, soportando la tormenta, hasta el mediodía, cuando la nueva protección quedó instalada.El tiempo, en todos los Picos de Europa, es muy malo. Níeva con intensidad -junto al refugio de Urriello se ha medido un metro- y el viento es de una gran fuerza, habiendo además tormenta eléctrica. Las temperaturas son extremadamente bajas, hasta el punto de que, un bidón de agua, de cinco litros, que sacaron los escaladores un momento fuera de la hamaca, se les congelé. Según los montañeros, esta es la peor tormenta que han sufrido en esa pared. Sin embargo, parece que el tiempo puede mejorar en pocos días ya que han. comprobado que la presión atmosferica está subiendo muy deprisa. Y se encuentran muy preparados, con el equipo adecuado para resistir los peores tiempos.

El estado físico, por otro lado, es bueno, aunque se encuentran algo cansados al nó haber podido dormir bien a causa del viento. En su ánimo no está la idea de abandonar, lo que, además sería bastante difícil, ya que están a unos 210 metros de altura y sólo pueden salir de la pared por la cumbre.