Entrenador de baloncesto

De haber trabajado en láépoca de las grandes compañías productoras todopoderosas, el realizador Jack Smight habría realizado una obra regular durante treinta años con alguna,película interesante de cuando en cuando. Al haberle tocado la etapa del poderío de la televisión, Smight debuta en ella como director de series; con gran trabalo se pasa al cine durante los sesenta y setenta, para hacor casi veinte películas y, últimamente, debe volver a la televisión para subsistir.Entre su producción cinematográfica no hay ninguna obra maestra, pero se pueden encontrar algunas películas que se salen bas...

De haber trabajado en láépoca de las grandes compañías productoras todopoderosas, el realizador Jack Smight habría realizado una obra regular durante treinta años con alguna,película interesante de cuando en cuando. Al haberle tocado la etapa del poderío de la televisión, Smight debuta en ella como director de series; con gran trabalo se pasa al cine durante los sesenta y setenta, para hacor casi veinte películas y, últimamente, debe volver a la televisión para subsistir.Entre su producción cinematográfica no hay ninguna obra maestra, pero se pueden encontrar algunas películas que se salen bastante de lo normal. Las policíacas El hombre ilustrado (1969), Así no se trata a una dama (1968) y Harper, investigador privado (1966), esta última, programada por Televisión Española para el próximo día 11 de septiembre. Una interesante adaptación de Corre, conejo, la primera parte de la trílogía escrita por John Updike, hecha en 1970. Y algunas comedias, como El tercer día (1965), la última de las cuales, Cambio de esposas (1979), se exhibe actualmente en España.

Apertura rápida (1979) es un telefilme sin pretensiones, hecho con una cierta habilidad, pero con un guión poco consistente y rodado en demasiado poco tiempo. Marca el retorno de Smight a la televisión y está interpretado por jóvenes actores desconocidos. Cuenta cómo un joven teórico del baloncesto consigue que le nombren entrenador del equipo de una pequeña universidad y decide buscar jugadores en el barrio de Harlem. Y no se libra del tono de buenos sentimientos y moralizantes que inevitablemente impone el medio.