Carrillo afirma que se ha dado una salida real a los problemas del PCE

"Haremos lo posible para que el Gobierno se mantenga hasta 1983, aunque claro está que sin hacer concesiones fundamentales", dijo ayer el secretario general del Partido Comunista, Santiago Carrillo, en su primera aparición pública tras la reunión del comité central del pasado fin de semana, en la que fue rechazada su dimisión al frente del PCE. Tras afirmar que sí se ha dado una salida real a los problemas del partido y que éste no está en crisis, Santiago Carrillo se mostró ligeramente optimista acerca de las perspectivas comunistas ante las próximas elecciones generales, que, insistió, el PC...

"Haremos lo posible para que el Gobierno se mantenga hasta 1983, aunque claro está que sin hacer concesiones fundamentales", dijo ayer el secretario general del Partido Comunista, Santiago Carrillo, en su primera aparición pública tras la reunión del comité central del pasado fin de semana, en la que fue rechazada su dimisión al frente del PCE. Tras afirmar que sí se ha dado una salida real a los problemas del partido y que éste no está en crisis, Santiago Carrillo se mostró ligeramente optimista acerca de las perspectivas comunistas ante las próximas elecciones generales, que, insistió, el PCE hará lo posible porque se celebren en 1983.

Carrillo volvió de nuevo a proclamar los peligros de una bipolarización política en el país, atacando a diestra (Fraga) y siniestra (PSOE). "La derecha se está convirtiendo en un peligro real para el país. No sólo a causa de los poderes fácticos, sino como consecuencia de que incluso dentro del Parlamento crece una fuerza impregnada aún de residuos del sistema político anterior. En torno a Fraga se está produciendo un aglutinamiento de todas las fuerzas que quieren modificar la Constitución en sus aspectos más renovadores".Sobre el PSOE, Carrillo dijo que "no va hacia una línea Mitterrand, sino hacia una línea Soares, pero en peor. Los socialistas se desmarcan cada día más de la revolución por vías democráticas y se declaran socialdemócratas", dijo también el líder comunista, que estuvo flanqueado en la conferencia de prensa por el vicesecretario general, Jaime Ballesteros, y por su asesor legal, Enrique Curiel.

Entre las concesiones que el PCE no hará al Gobierno se encuentra la relacionada con el necesario cese del director general de RTVE, Carlos Robles Piquer, dijo Carrillo, añadiendo que "esperamos que ningún truco procedimental aparte de la discusión de esta semana la moción pidiendo el cese de Robles". Dijo que el director general de RTVE no sólo había favorecido la imagen de Fraga, sino que además dio una imagen subliminal del Gobierno en general y de Calvo Sotelo en particular "muy parecida a la que nos ofrecía el régimen anterior: Calvo Sotelo bajo palio , Calvo Sotelo inaugu rando obras públicas... La falta de inteligencia política y no sé que otras razones parecen haber impedido a Calvo Sotelo darse cuenta de esto". Como ejemplo del apoyo televisivo a Alianza Popular, Carrillo citó el hecho de que inmediatamente antes de la retransmisión de la inauguración del Mundial de fútbol, apareció Jorge Verstrynge, secretario general de AP, en un anuncio de la Cruz Roja.

No citó a Sartorius

Aunque la mayor parte de la larga exposición inicial de Carrillo -casi una hora ininterrumpida hablando- estuvo dedicada a los problemas internos del PCE tras la reunión de su comité central el pasado fin de semana, el líder comunista no citó expresamente ni una sola vez al dimitido vicesecretario general Nicolás Sartorius. Posteriormente, se limitó a decir que "entre nosotros nadie ha planteado el nombramiento de un nuevo vicesecretario general", aunque admitió que se está pensando en una posible ampliación del comité ejecutivo y del secretariado en una próxima reunión del comité central. Carrillo dijo que en el fondo de la batalla vivida en el seno del PCE en los últimos días se encuentra la decisión sobre si se continúa o no en el camino del eurocomunismo. También dijo que el PCE ha hecho "un esfuerzo inaudito de renovación" y que se continuaría en esta misma línea aunque "al renovarnos no queremos romper con nuestra historia". Pese a todas las dudas vertidas en la prensa respecto a su dimisión, Carrillo insistió en que sólo en último momento "y haciendo un esfuerzo sobre mi orgullo", decidió retirar esta dimisión a la vista de que todo el comité ejecutivo se solidarizaba con él. Insinuó que han sido los enemigos de su partido quienes han inventado la expresión "vieja guardia carrillista" negando la existencia de tal vieja guardia y la preponderancia del llamado "aparato de París".El secretario general comunista afirmó que caira a las elecciones el PCE adoptará una estretegia de marketing político semejante a la de otros partidos, pero para ello aseguró no se va a recurrir a la financiación externa de otros países,"aunque haya, quien diga que somos demasiado quijotes por ello. Mientras yo esté en este puesto, el PCE buscarli sus recursos económicos aquí dentro".

Negó que el PCE haya obstaculizado nunca la independencia de CC OO, aunque se preguntó si los comunistas que trabajan en CC OO defienden o no la política del partido. Sobre la anunciada política de puertas abiertas respecto a los expulsados del PCE, Santiago Carrillo aseguró que "personalmente no tendria ningún inconveniente en que, de regresar, estos sancionados volvieran a ocupar los puestos directivos que antes tenían". Aunque también advirtió que unas medidas de reconciliación y amnistía no serían posibles porque significaría la reapertura de todas las polémicas.

En medios de la dirección del PCE se espera con notable interés la convocatoria de la próxima reunión del comité central, que podría tener lugar dentro de dos semanas, y en la que, entre otras cosas, se estudiaran nuevos nombres para ser ascencidos al comité ejecutivo, así como el nombramiento ,de una comisión electoral que prepare las listas de candidatos para las próximas elecciones generales.