El internacional italiano Antognoni, a punto de fallecer en Florencia

El domingo, Italia vivió una de las jornadas más negras de su vida deportiva. En varios campos -entre ellos, Milán, Florencia, Perusa y Cesena- se registraron actos de vandalismo en los que se produjeron numerosos heridos; entre ellos, dos en Milán. En Florencia, el jugador Giancarlo Antognoni, en un encontronazo con el portero del equipo, Genoa, estuvo a punto de fallecer. Lo salvaron in extremis dos médicos con la reanimación cardíaca y la respiración boca a boca tras habérsele parado algunos segundos el corazón.

Antognoni fue operado ayer del cerebro y, si podrá volver a jugar, n...

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El domingo, Italia vivió una de las jornadas más negras de su vida deportiva. En varios campos -entre ellos, Milán, Florencia, Perusa y Cesena- se registraron actos de vandalismo en los que se produjeron numerosos heridos; entre ellos, dos en Milán. En Florencia, el jugador Giancarlo Antognoni, en un encontronazo con el portero del equipo, Genoa, estuvo a punto de fallecer. Lo salvaron in extremis dos médicos con la reanimación cardíaca y la respiración boca a boca tras habérsele parado algunos segundos el corazón.

Antognoni fue operado ayer del cerebro y, si podrá volver a jugar, no será antes de dos meses, según los pronósticos médicos.En Milán, donde jugaba el Roma, antes y después del partido relucieron los cuchillos. Hubo doce heridos, de los cuales, dos muy graves, que resultaron con el abdomen traspasado. Hubo también lanzamiento de petardos y actos de salvajismo entre los hinchas de ambos equipos.

En Perugia, el árbitro milanés Tonolini estuvo asediado al terminar el partido tras haber perdido el Perugia contra el Pisa. Su taxi fue incendiado y los hinchas se enfrentaron con la policía lanzando cócteles molotov.

También en Florencia, mientras Antognoni corría moribundo hacia el hospital, resultaron heridos con cuchillos varios espectadores. Tanto en Milán como en los otros campos, donde parecía que se habían dado cita los grupos de violentos faca en mano, la policía disparó tiros de pistola al aire para amedrentar a los agitadores. Los disparos crearon, sin embargo, mucho pánico en la gente, que al escapar produjo varios heridos.

Toda la Prensa ha condenado duramente este nuevo despertar de la violencia en los campos de fútbol italianos, que se había atenuado bastante en los últimos tiempos.

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