Cartas al director

Tarifas elétricas

Tanto J. Rodríguez de Pablo, en EL PAIS del sábado 24, como el editorial del domingo 25 tratan de las tarifas eléctricas de un modo macroeconómico o general, al que no tengo nada que objetar. En ambos casos no hacen mención a la estructura actual de las tarifas, y yo me refiero en especial a las de uso doméstico y, en particular, a las tarifas binomias tal como ahora son.Vengo siguiendo las opiniones que se vierten en EL PAÍS desde el comienzo de la crisis del petróleo, que prácticamente coinciden en el tiempo con la vida de este periódico, y no he leído a nadie que hable de la irracion...

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Tanto J. Rodríguez de Pablo, en EL PAIS del sábado 24, como el editorial del domingo 25 tratan de las tarifas eléctricas de un modo macroeconómico o general, al que no tengo nada que objetar. En ambos casos no hacen mención a la estructura actual de las tarifas, y yo me refiero en especial a las de uso doméstico y, en particular, a las tarifas binomias tal como ahora son.Vengo siguiendo las opiniones que se vierten en EL PAÍS desde el comienzo de la crisis del petróleo, que prácticamente coinciden en el tiempo con la vida de este periódico, y no he leído a nadie que hable de la irracionalidad de esta tarifa en relación con la crisis energética que padecemos.

Supongamos dos consumidores con igual potencia instalada y con el mismo consumo, único caso en el que el precio del kilovatio/hora será igual para ambos, y a uno de estos dos consumidores se le ocurre hacer caso de las voces que le piden que ahorre energía, la tarifa le castiga y el precio del kilovatio/hora le saldrá más caro.

La actual tarifa está hecha en una época de energía barata y abundante. El precio resultante del kilovatio/hora es decreciente para un mayor consumo. Prima el derroche. No es lógica para 1981./

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