Los conspiradores que asesinaron a John Kennedy manipularon su cadáver

Un solo cadáver, el del presidente John F. Kennedy, y dos féretros. Además de la manipulación de su cerebro para «despistar» en torno a la entrada de la bala mortal. Estos y muchos otros condimentos aderezan la espeluznante versión desarrollada en el libro Best evidence (La mejor prueba), a punto de aparecer en Estados Unidos. Un físico de 41 años metido a escritor, David Lifton, tras quince años de investigación concienzuda, llega a la conclusión de que en la conspiración que acabó con la vida de Kennedy estuvieron implicados el Ejecutivo y el Servicio Secreto, así como las personas no...

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Un solo cadáver, el del presidente John F. Kennedy, y dos féretros. Además de la manipulación de su cerebro para «despistar» en torno a la entrada de la bala mortal. Estos y muchos otros condimentos aderezan la espeluznante versión desarrollada en el libro Best evidence (La mejor prueba), a punto de aparecer en Estados Unidos. Un físico de 41 años metido a escritor, David Lifton, tras quince años de investigación concienzuda, llega a la conclusión de que en la conspiración que acabó con la vida de Kennedy estuvieron implicados el Ejecutivo y el Servicio Secreto, así como las personas no identificadas que dirigieron los movimientos del cadáver.

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