Miguel Mayer,

de once años de edad, resultó con las dos piernas y un brazo rotos, ayer por la tarde, después de que se precipitara por el hueco del ascensor de su casa, en el número 64 de la calle del Pintor Rosales, desde el sexto piso....

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de once años de edad, resultó con las dos piernas y un brazo rotos, ayer por la tarde, después de que se precipitara por el hueco del ascensor de su casa, en el número 64 de la calle del Pintor Rosales, desde el sexto piso.

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