Una delegación comercial española visita Albania

Mañana llega a Tirana la primera delegación comercial española en los 35 años de existencia de la República Popular de Albania. Fernando Ballestero, jefe de la oficina comercial española en la vecina Yugoslavia, coincidirá en su viaje con seis hombres de empresa españoles del sector siderúrgico, en un intento por iniciar contactos comerciales directos son Albania. España y Albania no han establecido todavía relaciones diplomáticas, formando este Estado adriático, con Israel, el dúo de los ignorados por la diplomacia española en el Mediterráneo.Hasta la fecha, España y Albania, país de menos de...

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Mañana llega a Tirana la primera delegación comercial española en los 35 años de existencia de la República Popular de Albania. Fernando Ballestero, jefe de la oficina comercial española en la vecina Yugoslavia, coincidirá en su viaje con seis hombres de empresa españoles del sector siderúrgico, en un intento por iniciar contactos comerciales directos son Albania. España y Albania no han establecido todavía relaciones diplomáticas, formando este Estado adriático, con Israel, el dúo de los ignorados por la diplomacia española en el Mediterráneo.Hasta la fecha, España y Albania, país de menos de tres millones de habitantes y una extensión equivalente a un tercio de Portugal, venían comerciando un poco sin saberlo. El flujo comercial entre ambos países era triangular, la mayoría de las veces a través de brokers italianos, suizos o austriacos.

Si bien el comercio directo hispano-albanés no puede plantear promesas espectaculares, el vacío industrial y tecnológico que ha dejado la República Popular China, al renunciar por motivos de represalia política a su posición monopolista en el mercado albanés, abre perspectivas de cierto porte para algunas empresas españolas.

Hasta la fecha, ahí está el ejemplo de 1979, año en que España compró unos cuatro millones de dólares en Albania sin vender nada, ha persistido un saldo ocioso por parte española.

España está interesada en la compra de naftas. Albania se autoabastece en petróleo, y posiblemente el mercado de los vagones, que hoy copa Turquía, podría haber sido ganado por la competencia española, de haberse iniciado antes el trato comercial hispano-albanés. La visita a Tirana del jefe de la delegación comercial española en Belgrado es devolución de la que hace unos meses hizo a Madrid una delegación del Ministerio de Comercio albanés.

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