Tribuna:TRIBUNA LIBRE

Ante el congreso extraordinario de USO

Se van a celebrar desde hoy las sesiones de nuestro congreso confederal extraordinario, que continuará los días 27 y 28 de septiembre. No obstante, estas líneas han sido escritas dos días antes de la apertura de dicho congreso y tienen, lógicamente, un carácter condicional, pendiente del desarrollo y resoluciones finales del mismo.Se ha especulado en, los últimos meses sobre el papel y el futuro de USO, asociando esto al significado del congreso que vamos a celebrar. Para unos, las especulaciones han estado basadas en la supuesta derechización de USO y el vacío de sus contenidos sindicales. Ot...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Se van a celebrar desde hoy las sesiones de nuestro congreso confederal extraordinario, que continuará los días 27 y 28 de septiembre. No obstante, estas líneas han sido escritas dos días antes de la apertura de dicho congreso y tienen, lógicamente, un carácter condicional, pendiente del desarrollo y resoluciones finales del mismo.Se ha especulado en, los últimos meses sobre el papel y el futuro de USO, asociando esto al significado del congreso que vamos a celebrar. Para unos, las especulaciones han estado basadas en la supuesta derechización de USO y el vacío de sus contenidos sindicales. Otros han asociado directamente lo anterior a vinculaciones por parte de USO con el, partido mayoritario, UCD; algunos centran sus expectativas en la necesidad de un tercer componente sólido del mapa sindical español, etcétera. Hay de todo, pero con un claro denominador común: USO polariza la atención y las expectativas sindicales de este país para bien o para mal y desde el bien o desde el mal.

Esas expectativas volcadas hacia USO tienen dos referencias en el tiempo, que son: el congreso confederal que estamos a punto de inaugurar y las próximas elecciones sindicales. En este breve artículo voy a limitar el comentario al primer aspecto -el congreso-, dejando para otra ocasión un tratarniento detallado sobre nuestra valoración de las elecciones sindicales y el papel de USO ante, las mismas.

Como ya señalamos en la presentación pública del congreso -de la que EL PAIS no hizo la más minima referencia en su día-, con el mismo USO persigue tres grandes objetivos, que el congreso deberá ratificar o no en su conjunto o en parte: primero, el establecimiento de unas señas de identidad de USO a la medida de toda la clase trabajadora, en el respeto de su propio pluralismo ideológico, filosófico o religioso. Segundo, dotarnos de un modelo y una estructura organizativa por y para una acción sindical eficaz y coherente con los valores de unidad y solidaridad que deben inspirar siempre la actividad del sindicato. Y tercero, fijar nuestra posición y alternativa ante la crisis global en la que estamos atrapados los trabajadores, la sociedad y el país en su conjunto.

Esbozo sucintamente los contenidos de esos tres planos en los que se enmarca nuestro congreso confederal extraordinario.

En lo referido al tema de las señas de identidad de USO, el congreso va a emplazar la solución definitiva a una contradicción histórica que nos ha provocado muchos trastornos y disgustos, es pecialmente en estos años de la transición. Me refiero al hecho de, que USO se declarara organiza ción abierta a todos.los trabajadores, autónoma y, al tiempo, cerrada en su adscripción ideológica (socialismo autogestionario). El congreso deberá escoger entre la propuesta que formula el actual equipo dirigente de USO (sindicato de clase, de masas, democrático, basado en la autonomía y en la independencia estratégica, unitario, pluralista e internacionalista), o bien la concepción de sindicato socialista autogestionario. En definitiva, la opción clarificadora que supere la contradicción a la que me refería anteriormente; es decir, sindicato para todos los trabajadores por el mero hecho de serlo, o sindicato para una parte de ellos en función de su ideología. Lo que no vamos a mantener es la ambigüe dad de pretender ser lo uno y lo otro al mismo tiempo. Esa ambigüedad conduce inevitablemente al oportunismo y al travestismo electoral, como ya le está ocurrien do a alguna central sindical: ser, según convenga, sindicato para to dos o sindicato socialista.

En lo referente al tema de nuestro modelo y estructura organizativa, el congreso tiene delante una amplia propuesta que pone el acento en los siguientes objetivos:

1. Garantizar la unidad confederal de USO y su cohesión interna, haciendo esto compatible con la autonomía funcional de las organizaciones profesionales y territoriales de USO y la solidaridad entre las mismas.

2. Prioridad al protagonismo de las federaciones profesionales de rama en el sindicato por localizarse en ellas la acción sindical en su raíz y en su homogeneidad básicas.

3. Derivado de lo anterior, situar correctamente el papel de las uniones territoriales en nuestra central, superando las deficiencias y los vicios organizativos propios de una concepción territorialista de la acción sindical. Concepción que nos ha sido impuesta como una herencia, una más, de nuestra trayectoria y esquema organizativo en la clandestinidad. Para nosotros, la unión territorial en el sindicato tiene unas funciones específicas imprescindibles, y es un antídoto frente a la tentación corporativista y un soporte insustituible para dar a la actividad global del sindicato una auténtica dimensión de clase.

Por último, en el plano de nuestra alternativa a la crisis profunda que atraviesa nuestro país, el con greso abordará básicamente los si guientes aspectos:

1. El relanzamiento selectivo y controlado de la inversión.

2. El desarrollo de la estructura y política fiscal.

3. La reforma y extensión del subsidio de paro.

4. Medidas concretas en la perspectiva de una política del reparto del trabajo existente.

5. La reactivación del sector agrario.

6. La reestructuración negociada de los sectores industriales en crisis y la reconversión de los excedentes de plantilla.

7. La defensa del poder adquisitivo global de las rentas salariales, sobre bases de solidaridad, reequilibrio y moderación de dichas rentas.

8. Los problemas de racionalización y aumento de la productividad.

9. Las contrapartidas en materia de calidad de vida y salario social.

10. La sindicalización de los sectores marginales.

11. La potenciación del AMI y de la negociación colectiva con arreglo al mismo.

12. El reforzamiento de la acción sindical en la empresa y de la acción sectorial.

13. El desarrollo del marco democrático de relaciones laborales y la reforma parcial del Estatuto de los Trabajadores.

14. Los problemas de la entrada de España en la CEE.

15. La propuesta estratégica de alternativa negociada a la crisis como un esfuerzo de solidaridad y concertación entre las fuerzas sociales, políticas y económicas, para salvar y profundizar la democracia y las libertades.

Resumiendo: con este congreso perseguimos sindicalizar USO en todos los sentidos para hacer de la misma un instrumento válido a la inmensa mayoría de'los trabajadores de este país que están por organizar sindicalmente. Es un penúltimo peldaño el que ascendemos con este congreso previo a la consolidación definitiva de USO como resultado de una tenacidad histórica que nadie puede negarnos, sea cual sea la óptica o el talante con el que nos contemplen.

Manuel Zaguirre es secretario general de Unión Sindical Obrera.

Archivado En