Cartas al director

Los Juegos de Moscú

Cada día me siento más preocupado y decepcionado al contemplar que los Juegos Olímpicos, muy próximos ya, se van a perder por el pataleo de los norteamericanos. Los jóvenes empiezan a soñar con las olimpiadas, los mayores nos ilusionamos con lo que podíamos haber hecho de jóvenes y los niños juegan a ser campeones.Ciertamente, los problemas internacionales son muchos, pero seguramente nos vendría muy bien dejarnos llevar por esa ilusión juvenil de los Juegos, si Carter quisiera.

Cuando veo en televisión los anuncios que hacen referencia a Moscú o cuando mis hijos me preguntan por qué no...

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Cada día me siento más preocupado y decepcionado al contemplar que los Juegos Olímpicos, muy próximos ya, se van a perder por el pataleo de los norteamericanos. Los jóvenes empiezan a soñar con las olimpiadas, los mayores nos ilusionamos con lo que podíamos haber hecho de jóvenes y los niños juegan a ser campeones.Ciertamente, los problemas internacionales son muchos, pero seguramente nos vendría muy bien dejarnos llevar por esa ilusión juvenil de los Juegos, si Carter quisiera.

Cuando veo en televisión los anuncios que hacen referencia a Moscú o cuando mis hijos me preguntan por qué no van a ir los norteamericanos y otros a las olimpiadas, la verdad es que no se qué contestarles. ¿Se puede destrozar la ilusión de todos por una campaña electoral? Parece que sí. Pero también se destrozan cuatro años de entrenamientos de los deportistas, horas y horas de esfuerzos, sinsabores y tragos amargos. ¿Merece la pena? ¿Piensan los norteamericanos que van a conseguir que la URSS retire sus tropas simplemente con el boicoteo a los Juegos? /

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