La UEFA advierte a Inglaterra de posible suspensión del partido

Los sucesos del encuentro entre belgas e ingleses producidos por los seguidores británicos, que obligaron al lanzamiento de gases lacrimógenos, han producido una de las más peculiares decisiones de la UEFA. El máximo organismo europeo ha decidido que en el supuesto caso de que en el campo, hoy domingo, vuelvan a producirse situaciones de violencia, el encuentro será suspendido y se concederá la victoria a Italia por 2-0.La UEFA, que todavía no ha respondido al telegrama de protesta enviado por la Federación Española con motivo de los violentos hechos ocurridos en la final de la Recopa, en dond...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Los sucesos del encuentro entre belgas e ingleses producidos por los seguidores británicos, que obligaron al lanzamiento de gases lacrimógenos, han producido una de las más peculiares decisiones de la UEFA. El máximo organismo europeo ha decidido que en el supuesto caso de que en el campo, hoy domingo, vuelvan a producirse situaciones de violencia, el encuentro será suspendido y se concederá la victoria a Italia por 2-0.La UEFA, que todavía no ha respondido al telegrama de protesta enviado por la Federación Española con motivo de los violentos hechos ocurridos en la final de la Recopa, en donde los seguidores ingleses causaron toda clase de lesiones a los valencianistas, ha amenazado seriamente está vez; pero, precisamente cuando Italia va a ser una de las protagonistas de un encuentro decisivo. La UEFA está presidida por un italiano; Artemio Franchi.

Más información

Las autoridades policiales de Turín han tomado toda clase de precauciones para el encuentro, a fin de que no se repitan los lamentables hechos del pasado miércoles. Todos los seguidores ingleses, unos 10.000, serán ubicados en una parte concreta del graderío y viallados por fuertes contingentes policiales con toda clase de armas y aparatos disuasorios. La Prensa italiana comenta el hecho y señala que el estadio se ha convertido en un bunker.

La federación inglesa ya ha sido sancionada económicamente con cerca de millón y medio de pesetas. En el partido en que se produjeron los hechos, el propio seleccionador inglés, Grenwood, tuvo que tomar un micrófono para pedir calma a sus compatriotas. Tras el encuentro, Grenwood llegó a decir que le gustaría «ver a sus estúpidos compatriotas en un barco a la deriva». Bobby Charlton confesó que se sentía avergonzado.

Archivado En