Piden descalificacion perpetua para Rossi

El magistrado de la Federación Italiana de Fútbol ha pedido nada menos que la descalificacion perpetua del presidente del equipo Milán, señor Cólombo, y de los siguientes jugadores: Albertosi y Morini, del Milán; Giordano, Manfredonia y Cacciatori, del Lazio; Paolo Rossi, Della Martira y Zefchini, del Perúggia, y Pellegrini, del Avellino.Por el discutido partido Milán-Lazio del 6 de enero pasado, el fiscal ha pedido que el Milán baje al último puesto de la clasificación y, por tanto que descienda, a Segunda División y suba a Primera el Catanzaro. Para el Lazio ha pedido un millón de pesetas...

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El magistrado de la Federación Italiana de Fútbol ha pedido nada menos que la descalificacion perpetua del presidente del equipo Milán, señor Cólombo, y de los siguientes jugadores: Albertosi y Morini, del Milán; Giordano, Manfredonia y Cacciatori, del Lazio; Paolo Rossi, Della Martira y Zefchini, del Perúggia, y Pellegrini, del Avellino.Por el discutido partido Milán-Lazio del 6 de enero pasado, el fiscal ha pedido que el Milán baje al último puesto de la clasificación y, por tanto que descienda, a Segunda División y suba a Primera el Catanzaro. Para el Lazio ha pedido un millón de pesetas de multa. Para los otros dos equipos incriminados: Avellino-Peruggia, por el partido del 30 de diciembre de 1979, se ha pedido el castigo de la pérdida de cinco puntos en el próximo campeonato. Para Montesi, del equipo Lazio, el juez ha pedido sólo seis meses de descalificación, mientras que el proceso a Wilson, del Lazio, será tratado aparte.

La absolución ha sido solicitada para Garlaschelli y Viola, del Lazio; Chiodi, del Milán; Di Somina, Cattaneo y De Ponti, del Avellino, y Casarsa, del Peruggia.

El más destrozado es el famoso jugador del Peruggia, Rossi, de quien se rumorea que lo deseaba comprar un equipo español. «Este es el momento más amargo de mi vida. Me consuela que tengo la conciencia muy limpia», ha dicho.

El verdadero artífice de esta lluvia de condenas pedidas por el fiscal De Biasi ha sido Massimo Cruciani, uno de los mayores acusadores desde el primer momento y a quien los jueces han escuchado mucho, afirmando que ha sido un acusador implacable hasta el último momento: «No desmiento ni una sola de mis palabras. El dinero, los jugadores se lo metieron en el bolsillo», dijo al final de su deposición y afirmó que, en realidad, el gran estafado en este asunto había sido él.

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