Tribuna:

Un número uno

Ningún ranking español dedicado a 1979 recogerá el nombre de uno de los deportistas más singulares de. este país, Francisco Pastor Genovés, un pelotari valenciano de corta fama -reducida a su tierra-, pero largos dineros, porque en tres años ha logrado situarse a la altura de aquellos jugadores considerados como míticos por los aficionados.Genovés es el máximo exponente de una modalidad regional tradicionalmente marginada por la máxima entidad rectora del deporte nacional. La aparición de Genovés ha hecho posible el resurgir de una especialidad que, aun siendo parte de la cultura del Pa...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Ningún ranking español dedicado a 1979 recogerá el nombre de uno de los deportistas más singulares de. este país, Francisco Pastor Genovés, un pelotari valenciano de corta fama -reducida a su tierra-, pero largos dineros, porque en tres años ha logrado situarse a la altura de aquellos jugadores considerados como míticos por los aficionados.Genovés es el máximo exponente de una modalidad regional tradicionalmente marginada por la máxima entidad rectora del deporte nacional. La aparición de Genovés ha hecho posible el resurgir de una especialidad que, aun siendo parte de la cultura del País Valenciano, ha sido menospreciada por su carácter eminentemente popular.

En los últimos años ha aumentado el número de trinquetes, y en los pueblos se ha recuperado la fiesta de la pelota en sus modalidades de largues, galotxa, raspall y trinquet. El renacimiento del deporte popular, afortunadamente, parece inevitable.

La pelota valenciana es viril y espectacular y no necesita,en sus formas más simplesotro escenario que la propia calle. En Benimantell (Alicante), La Canal de Navarres (Valencia) o Burriana (Castellón), la pelota vuelve a ser parte importante del movirráento deportivo.

Genovés, un número uno en la cancha, lo es también en lo que respecta al fair play. Su calidad es tal que juega siempre con handicap. Las partidas que le preparan ha de ganarlas siempre contra el mejor trío, y llevando como acompañante a un deficiente delantero. Las derrotas las admite sin un mal gesto, y las victorias sin especiales efusiones; es un deportista a tener en cuenta.

Archivado En