Normalización de las relaciones entre España y Suecia

Los Reyes de España, don Juan Carlos y doña Sofía, iniciaron ayer una visita oficial a Suecia que en Estocolmo se considera como el punto de arranque definitivo para la normalización de las relaciones entre ambos países. Esta idea fue destacada por los Monarcas de España y Suecia en los discursos que ambos Reyes pronunciaron al término de la cena de gala que Carlos Gustavo ofreció a los Soberanos españoles en el palacio real sueco. Don Juan Carlos habló del «reencuentro» de España y Suecia, y el rey sueco, de la nueva etapa que se inicia en las relaciones de las dos naciones europeas.

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Los Reyes de España, don Juan Carlos y doña Sofía, iniciaron ayer una visita oficial a Suecia que en Estocolmo se considera como el punto de arranque definitivo para la normalización de las relaciones entre ambos países. Esta idea fue destacada por los Monarcas de España y Suecia en los discursos que ambos Reyes pronunciaron al término de la cena de gala que Carlos Gustavo ofreció a los Soberanos españoles en el palacio real sueco. Don Juan Carlos habló del «reencuentro» de España y Suecia, y el rey sueco, de la nueva etapa que se inicia en las relaciones de las dos naciones europeas.

Bajo un cielo gris y con una tenue lluvia comenzó la visita de los Monarcas españoles a la capital sueca. En el aeropuerto Arlanga, de Estocolmo, los Soberanos y su séquito, en el que viajan el ministro de Asuntos Exteriores, Marcelino Oreja, y su esposa, fueron recibidos por el duque de Halland en una sencilla ceremonia. Posteriormente, la comitiva se trasladó en automóviles al Ayuntamiento de la capital, donde comenzó, en realidad, la visita oficial. En el patio de la casa consistorial, el rey Carlos Gustavo y la reina Silvia recibieron a sus huéspedes, a quienes invitaron a subir a dos carrozas descubiertas que trasladaron a los Soberanos al palacio real, residencia de los Reyes de España durante su estancia en Estocolmo. A primeras horas de la tarde, los Reyes se trasladaron al Museo Vassa, donde contemplaron los restos del buque de guerra sueco Vassa, del siglo XVII, hundido y posteriormente rescatado en la bahía de Estocolmo. El programa oficial de ayer culminó con una recepción al cuerpo diplomático acreditado en esta ciudad y con la cena de gala del palacio real.El interés político y popular de la visita de los Reyes de España a Suecia se centra, como señaló don Juan Carlos en su discurso, en el «reencuentro» de ambos países. La opinión pública en general, guiada por sus dirigentes políticos, ha sido la más crita y escéptica de Europa Occidental ante el proceso de democratizador español. Aquí arranca el primer significado de esta visita, al que se le pueden añadir otras ideas, como lo es el hecho de que don Juan Carlos viaja por un país neutral, el tercero que visita después de Suiza y Austria, y por una nación del noroeste de Europa, nuestra «antípoda» continental, que se ha convertido en los últimos años en el símbolo de una sociedad progresista y avanzada con altos niveles de desarrollo y un importante equilibrio social. Una sociedad organizada por la izquierda socialdemócrata, que ahora, en los recientes comicios generales, confirma su deseo de ser gobernada a la derecha por una coalición liberal-conservadora.

En los medios políticos de Estocolmo existe una gran curiosidad por la personalidad del rey don Juan Carlos y por su participación en el proceso político español de los últimos años. Han causado sorpresa las declaraciones del Rey de España al segundo canal de la televisión sueca, en las que el Monarca habla con naturalidad de los problemas políticos españoles: terrorismo, crisis económica, situación militar, etcétera, y se hacen toda serie de análisis y comparaciones entre el papel de la monarquía española y la sueca en el ámbito de sus respectivos Estados.

Discurso de don Juan Carlos

A muchas de estas interrogantes respondió ayer el propio Rey en su discurso en el palacio real, en el que don Juan Carlos dijo: «España y Suecia son monarquías parlamentarias y constitucionales; dos sistemas políticos pluralistas que comparten una misma fe en los principios democráticos y que se esfuerzan en construir y preservar un modelo de sociedad, basado en la justicia y la libertad.» El Monarca español se refirió también a la vocación europea española, a la política española en favor de la distensión, del equilibrio económico entre el Norte y el Sur, y a la necesidad de buscar una mayor concertación política, cultural y económica entre España y Suecia.

Don Juan Carlos se refirió también a la próxima celebración en Madrid de la tercera fase de la Conferencia Europea de Seguridad y Cooperación, de la que dijo que espera que «contribuya a consolidar los esfuerzos en favor del entendimiento, de la confianza y de la ayuda mutua entre todos los pueblos de Europa». Este es un tema que interesa mucho en Suecia y que se incluirá en los puntos que los ministros de Asuntos Exteriores de España y Suecia, Oreja y Ullsten, debatirán hoy en privado. A España le interesa la opinión sueca sobre desarme y distensión, y a Suecia, recibir información sobre el Sahara, Guinea Ecuatorial y sobre los preparativos de la citada Conferencia. Tampoco se excluye el diálogo sobre la eventual candidatura hispana a la OTAN.

Por su parte, el rey Carlos Gustavo destacó en su discurso el deseo de su país de profundizar en el desarrollo de las relaciones de ambos países a partir de esta visita. El monarca sueco recordó en sus palabras el anterior viaje oficial del rey Alfonso XIII, y se refirió al proceso democrático español con estas palabras: «La visita de vuestras majestades tiene lugar en un momento muy propicio para profundizar las relaciones entre ambos países. Hemos seguido en Suecia con interés y simpatía el desarrollo político de España durante los últimos años. Sabemos bien que todos los partidos políticos democráticos españoles han insistido en el papel central que vuestra majestad ha tenido en la transformación pacífica del sistema político de su país en una democracia occidental ... »