El paro, principal preocupación del II Congreso del SLMM

El paro en el sector de los transportes marítimos, que a finales del pasado mes de marzo afectaba a 2.469 trabajadores (el 10% del sector), será el principal tema de debate del II Congreso del Sindicato Libre de la Marina Mercante, que se celebrará en La Coruña los próximos 10, 11 y 12 de agosto, y que ayer fue presentado en Madrid.Según el secretario de coordinación, Javier Lozano, además de este tema el congreso debatirá la actual carta de principios, manteniendo la actual estructura del sindicato (unitario, de clase, independiente, autónomo y democrático) y la reorganización del mism...

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El paro en el sector de los transportes marítimos, que a finales del pasado mes de marzo afectaba a 2.469 trabajadores (el 10% del sector), será el principal tema de debate del II Congreso del Sindicato Libre de la Marina Mercante, que se celebrará en La Coruña los próximos 10, 11 y 12 de agosto, y que ayer fue presentado en Madrid.Según el secretario de coordinación, Javier Lozano, además de este tema el congreso debatirá la actual carta de principios, manteniendo la actual estructura del sindicato (unitario, de clase, independiente, autónomo y democrático) y la reorganización del mismo, especialmente en su gestora.

En relación con el tema del paro, el congreso analizará el futuro de la marina mercante y hará pública la alternativa del sindicato al empleo en la mar, que pasa, a corto plazo, por el mantenimiento ineludible de los puestos de trabajo existentes.

Con un 10 % de paro registrado (uno de los índices más altos del país) y unas presiones de demanda de empleo cada día más fuertes, «la situación en el mar», dijeron, «comienza a ser angustiosa». Por ello, el SLMM solicita del Gobierno que no se promocionen las flotas extranjeras y exige que los transportes marítimos se hagan de acuerdo con las normas de la UNTACD.

El SLMM se creó en abril de 1975 y se desarrolló en la clandestinidad durante dos años hasta que fue legalizado. La lucha de las dos grandes centrales, CC OO y UGT, por hacerse con el control del sindicato originó una crisis que dio lugar al primer congreso extraordinario; después de 48 horas de deliberaciones, no se logró despejar la incertidumbre sobre la viabilidad de la primera experiencia unitaria del sindicalismo español. «Las tensiones», según reconocieron ayer los propios dirigentes, «podrían repetirse en La Coruña.»

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