Carreras de caballos

Los "steeples" pueden desaparecer

Las carreras de steeple-chase, modalidad de las pruebas de obstáculos, pueden desaparecer en un futuro no muy lejano, según una nota hecha pública por la Sociedad de Fomento y Cría Caballar. El motivo que parece inducir a dicho organismo a tomar esta decisión es el poco desarrollo que este tipo de carreras ha alcanzado en nuestro país en los últimos años.El steeple-chase comenzó a disputarse hace aproximadamente cinco años. La pista de La Zarzuela tuvo que ser modificada y para ello la sociedad invirtió una considerable cantidad de dinero. Poco a poco, los propietarios fueron des...

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Las carreras de steeple-chase, modalidad de las pruebas de obstáculos, pueden desaparecer en un futuro no muy lejano, según una nota hecha pública por la Sociedad de Fomento y Cría Caballar. El motivo que parece inducir a dicho organismo a tomar esta decisión es el poco desarrollo que este tipo de carreras ha alcanzado en nuestro país en los últimos años.El steeple-chase comenzó a disputarse hace aproximadamente cinco años. La pista de La Zarzuela tuvo que ser modificada y para ello la sociedad invirtió una considerable cantidad de dinero. Poco a poco, los propietarios fueron destinando parte de sus ejemplares a esta nueva especialidad de las carreras. Por otro lado, muchos caballos que hasta entonces estaban corriendo en vallas pasaron al steeple. Con el tiempo, esta afición y dedicación de los profesionales a los obstáculos fue decreciendo y, en la actualidad, no habrá más de diez caballos dedicados exclusivamente al steeple.

Los caballos que llegan al steeple son ejemplares ya viejos, que han perdido en gran parte la velocidad y que antes de dejar el hipódromo prueban suerte en los obstáculos. La no adquisición de caballos por parte de los propietarios para las carreras de steeple se debe al elevado índice de accidentes que se producen en estas pruebas y, por otro lado, los pocos alicientes que ofrecen.

Los jinetes de obstáculos, en general, se quejan de la posible desaparición del steeple. José Luis Balcones dice que van a perder una considerable fuente de ingresos y que le parece una enorme equivocación. Balcones afirma que no han existido nunca facilidades para el steeple, que ni tan siquiera ahora hay un sitio donde poder iniciar a los caballos. «Korimbo, por ejemplo -dice Balcones-, tuvo que ser entrenado en el Club de Campo porque no se puede llevar a un caballo de buenas a primeras a la pista de steeple.» Todo son problemas, de los que se quejan los profesionales.

La pista de steeple parece agradar a todos, a la vez que coinciden en afirmar que es una pena que se desaprovechen estas instalaciones. Balcones decía que si hubiera más facilidades habría más caballos para el steeple, y citaba el caso concreto de dos ejemplares de Jesús Méndez, que no pueden comenzar a saltar por no tener dónde.

Si en un plazo corto de tiempo no aparecen más caballos para el sieeple, esta modalidad terminará, aunque personas tan vinculadas a los obstáculos como el duque -de Alburquerque hagan todo lo posible por que ello no suceda, prestando incluso sus instalaciones particulares a profesionales del hipódromo.

Algunos profesionales dieron como posible solución al tema de los obstáculos que el hipódromo de Pineda en Sevilla se dedicara por completo a las carreras de vallas y de steeple-chase. La creación de esta temporada no parece satisfacer a muchos, además de que con los presupuestos recortados de la Sociedad de Fomento parece completamente inviable.

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