Intensas consultas de Suárez antes de optar entre investidura y elecciones
El presidente del Gobierno, Adolfo Suárez, recaba el máximo de datos antes de tomar su decisión sobre someterse al voto de investidura o celebrar elecciones generales. Además de intensas consultas con personas de UCD y ajenas al partido gubernamental, ha encargado un sondeo sobre una muestra de 1.500 personas, cuyo resultado le será entregado el lunes.
Un reflejo de la indecisión existente lo protagonizó ayer en los pasillos de las Cortes Rafael Arias-Salgado, quien aseguró que habrá investidura y poco después matizó y mitigó esta afirmación.El señor Suárez, que al parecer tenía previst...
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El presidente del Gobierno, Adolfo Suárez, recaba el máximo de datos antes de tomar su decisión sobre someterse al voto de investidura o celebrar elecciones generales. Además de intensas consultas con personas de UCD y ajenas al partido gubernamental, ha encargado un sondeo sobre una muestra de 1.500 personas, cuyo resultado le será entregado el lunes.
Un reflejo de la indecisión existente lo protagonizó ayer en los pasillos de las Cortes Rafael Arias-Salgado, quien aseguró que habrá investidura y poco después matizó y mitigó esta afirmación.El señor Suárez, que al parecer tenía previsto anunciar las elecciones al día siguiente del referéndum, comenzó a dudar como consecuencia del resultado, menos positivo de lo esperado. A partir de ahí y de la división gubernamental sobre el tema, se inició una carrera de indecisiones salpicáda de globos-sonda exploratorios.
Ayer, el secretario general de UCD, señor Arias-Salgado, calificó de caradura a quien hubiera afirmado que Suárez optará por las elecciones generales. Aseguró que, por el contrario, lo que habrá será investidura y después elecciones municipales. Preguntado sobre si esa era la voluntad del presidente, contestó afirmativamente, pero en seguida pidió a los periodistas que no lo dijeran así.
Sobre los votos que podría obtener el presidente del Gobierno en la investidura, el señor Arias-Salgado contestó que no habría problema, «ya que todo aquel que no quiera elecciones generales votará la investidura o, si no, habrá elecciones generales». Ante la posibilidad de que esto fuera una alusión a la Minoría Catalana, EL PAIS preguntó a su portavoz, Miguel Roca, quien manifestó: «No admitimos un chantaje así. Se han jugado la investidura. Una manifestación como esa, si tiene segundas intenciones, no es digna del secretario general de un partido importante, y si lo es, quiere de:cir que ese partido no es tan importante.»
Concluido el Pleno del Congreso, Rafael Arias-Salgado se dirigió rápido a su coche, en el que le abordaron los informadores, a quienes declaró que lo legalmente previsto son las municipales, y que la investidura «es una posibilidad, como también las elecciones generales».