Cartas al director

Boxeadores muertos

En una información aparecida en la edición del día 19 del pasado mes de jullo, titulada Borrachera de golpes, y en la que se alude al número de boxeadores muertos en nuestro país, se da una relación que es incompleta. Estimo que en un momento como éste en el que se está poniendo en causa la continuidad de ese bárbaro ejercicio que no debiera llamarse deporte, vale la pena aportar datos que reflejen verídicamente la peligrosidad que tal práctica acarrea. Por eso, a los púgiles muertos que se citan en la referida información debieran añadirse los siguientes: El boxeador italiano Perazzi...

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En una información aparecida en la edición del día 19 del pasado mes de jullo, titulada Borrachera de golpes, y en la que se alude al número de boxeadores muertos en nuestro país, se da una relación que es incompleta. Estimo que en un momento como éste en el que se está poniendo en causa la continuidad de ese bárbaro ejercicio que no debiera llamarse deporte, vale la pena aportar datos que reflejen verídicamente la peligrosidad que tal práctica acarrea. Por eso, a los púgiles muertos que se citan en la referida información debieran añadirse los siguientes: El boxeador italiano Perazzio, muerto después de un combate con el español Francisco Ros; el boxeador de color Kid Sotolongo, muerto a manos del púgil español Amalio Ortiz; el catalán Blay, fallecido tras de un combate con el italiano Clavari; el catalán Santandreu, de resultas de su encuentro con el púgil castellano Lamela, y el alicantino Benjamín Rodríguez, muerto a puños del vasco-valenciano Angel Felipe. Todos ellos producidos entre la fecha de 1928 que el informador da para el óbito de Gabiola, y la de 1969 en que se produce la del africano Daudu.

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