El Rey y el presidente recibieron al ministro suizo de Exteriores

Pierre Graber, ministro suizo de Asuntos Exteriores -consejero del Departamento Político Federal suizo es la denominación de su cargo-, fue recibido ayer por el Rey, en el palacio de La Zarzuela, en una audiencia que se prolongó por espacio de unos treinta minutos. Estuvieron presentes los embajadores de Suiza en España y de España en Suiza.Más tarde el señor Graber acudió al palacio de la Moncloa, donde se entrevistó con el presidente Suárez. A primeras horas de la tarde el ministro de Asuntos Exteriores, Marcelino Oreja, le ofreció un almuerzo en el Club de Campo, y posteriormente las delega...

Pierre Graber, ministro suizo de Asuntos Exteriores -consejero del Departamento Político Federal suizo es la denominación de su cargo-, fue recibido ayer por el Rey, en el palacio de La Zarzuela, en una audiencia que se prolongó por espacio de unos treinta minutos. Estuvieron presentes los embajadores de Suiza en España y de España en Suiza.Más tarde el señor Graber acudió al palacio de la Moncloa, donde se entrevistó con el presidente Suárez. A primeras horas de la tarde el ministro de Asuntos Exteriores, Marcelino Oreja, le ofreció un almuerzo en el Club de Campo, y posteriormente las delegaciones suiza y española mantuvieron una reunión de trabajo en el Ministerio de Asuntos Exteriores.

Por la noche el ministro suizo ofreció una cena en la embajada de su país, a su colega español, con lo que finalizó la estancia oficial en Madrid del señor Graber, que hoy por la mañana regresará a Suiza.

Elogios a los emigrantes

En una conferencia de prensa celebrada a media tarde, el señor Graber elogió a los trabajadores españoles en su país, y añadió que, pese a la disminución del empleo, apenas descendió la mano de obra española, lo que muestra el aprecio que Suiza tiene por ella.En relación a una pregunta sobre la posibilidad de que Suiza pudiese adoptar una legislación especial referente a la recepción de capitales que huyen de sus países de origen, el ministro Graber estimó que no había ninguna razón para ello, salvo si se tratase de capitales ganados ilegalmente. Por su parte, el embajador suizo en España informó que existen grandes posibilidades en cuanto a inversiones suizas en España.