El conflicto de las gasolineras, pendiente de la negociaciones entre CAMPSA y los empresarios

El conflicto de las gasolineras continúa sin solución, mientras la convocatoria de huelga a partir del próximo día 29 se mantiene por parte de los trabajadores, los cuales continúan votando para decidir su postura definitiva frente a la huelga. En las catorce provincias donde hasta el momento se conoce el resultado de estas votaciones, los trabajadores de gasolineras se han mostrado mayoritariamente favorables a la huelga.

Los empresarios, por su parte, mientras tratan de conseguir de CAMPSA un incremento de las comisiones que recientemente les han sido revisadas, se reunirán el próximo...

El conflicto de las gasolineras continúa sin solución, mientras la convocatoria de huelga a partir del próximo día 29 se mantiene por parte de los trabajadores, los cuales continúan votando para decidir su postura definitiva frente a la huelga. En las catorce provincias donde hasta el momento se conoce el resultado de estas votaciones, los trabajadores de gasolineras se han mostrado mayoritariamente favorables a la huelga.

Los empresarios, por su parte, mientras tratan de conseguir de CAMPSA un incremento de las comisiones que recientemente les han sido revisadas, se reunirán el próximo viernes, día 22, para estudiar la posibilidad de hacer una oferta económica que transitoriamente, y a la espera de que sus gestiones ante la Administración den resultados positivos, permita la reanudación de negociaciones con los trabajadores sobre el convenio colectivo del sector.Según informó a EL PAIS el presidente de la Agrupación Nacional de Estaciones de Servicio, Luis Alberto Salazar Simpson, la revisión de comisiones que ha impuesto recientemente CAMPSA son insuficientes, en lo económico, y, sobre todo, «totalmente arbitraria en su forma de aplicación, ya que se ha eludido la norma que los empresarios negociamos con el monopolio en 1970 y que servía de marco estable para la aplicación de las revisiones que, en la misma norma, se Fijaban cada dos años».

En este sentido, el señor Salazar Simpson explicó que su propuesta concreta a la reunión de empresarios del próximo viernes hará hincapié en la reivindicación ante CAMPSA de que sea respetado el pacto establecido en 1970. En caso contrario, la Agrupación Nacional de Estaciones de Servicio «solicitará el dictamen de expertos en derecho administrativo para establecer si CAMPSA ha incumplido o no su pacto con las estaciones de servicio».

«Estamos dispuestos -agregó el señor Salazar Simpson-, si fuera necesario, a hacer incluso una interpelación parlamentaria al Gobierno para ver si está dispuesto o no a mantener sus compromisos y, si fuera inevitable, plantear un contencioso a la Administración. Todo menos la situación en la que nos encontramos las empresas, a las que se pretende forzar a acceder a unas reivindicaciones que no podemos atender con las comisiones que, unilateralmente, nos ha impuesto CAMPSA.»

Hasta el año 1970 las relaciones económicas de CAMPSA con sus distribuidores no estaban sujetas a norma alguna. En 1970 fue cuando Hacienda dictó un reglamento, consultadas las estaciones de servicio, por el que las comisiones del monopolio a las gasolineras se establecían en 64 céntimos por litro expendido y se acordaba la revisión de estas comisiones cada dos años. En 1972 se inician las negociaciones entre ambas partes para establecer las nuevas comisiones, según unos determinados baremos contenidos en el referido reglamento, y, el primero de abril de 1973 la comisión se sube a ochenta céntimos. En 1975, nuevamente, según la citada norma, la comisión se fija en 1,15 pesetas por litro.

El conflicto surge en el presente año, cuando al tratar de negociar las nuevas comisiones -sobre las que, a cuenta y desde septiembre de 1976 se habían incrementado dieciocho céntimos litro- los empresarios de gasolineras se ven sorprendidos -siempre según la información facilitada por el señor Salazar Simpson- con una nueva distribución del montante total que para CAMPSA suponen las comisiones a sus distribuidores: 1,45 pesetas por litro de gasoil; 1,55 pesetas por litro de gasolina y 540.000 pesetas para cada estación de servicio, para cubrir los gastos fijos de las mismas.

«Estas cantidades, así como su distribución, además de insuficientes para que podamos atender las reivindicaciones obreras que fijan el salario diario en 776 pesetas, resultan totalmente arbitrarias, pues no se ha respetado el marco que ya teníamos establecido con CAMPSA», concluyó el señor Salazar Simpson.

Por otra parte, la federación del Combustible de CCOO -entre cuyos miembros figuran varios integrantes de la comisión negociadora del convenio colectivo del, sector- se entrevistará esta manana con el ministro de Hacienda para tratar del conflicto.