Hasta el martes no habrá normas electorales

Hasta el próximo martes no se publicará el decreto-ley con las normas electorales que han de regir la próxima convocatoria de elecciones generales. El anuncio fue hecho ayer por el Ministerio de Justicia y añada que se están dando a las mismas los últimos toques. En algunos círculos se interpreta este retraso -se daba por seguro que hubiesen aparecido ayer viernes- como consecuencia de algunas discrepancias en puntos concretos del texto articulado e, incluso, corno una posibilidad de corregir, al menos parcialmente, algunos de los aspectos más criticados por las personalidades políticas, e...

Hasta el próximo martes no se publicará el decreto-ley con las normas electorales que han de regir la próxima convocatoria de elecciones generales. El anuncio fue hecho ayer por el Ministerio de Justicia y añada que se están dando a las mismas los últimos toques. En algunos círculos se interpreta este retraso -se daba por seguro que hubiesen aparecido ayer viernes- como consecuencia de algunas discrepancias en puntos concretos del texto articulado e, incluso, corno una posibilidad de corregir, al menos parcialmente, algunos de los aspectos más criticados por las personalidades políticas, en sus primeras reacciones, tras el adelanto de líneas generales que facilitó el Gabinete después de su reunión del martes pasado.

Uno de los extremos que irás preocupaba en los sectores de la Oposición y sobre el que nada se ha aclarado ni en la referencia oficial, ni en la ampliación verbal del ministro de Justicia, es el referido a la posibilidad de que un candidato pueda presentarse por varias circunscripciones.

Fuentes del Partido Socialista Obrero Español creen saber que se limitará a una circunscripción -provincia- por candidato, lo que, según la opinión de buena parte de la oposición, perjudica notablemente a las formaciones de izquierda, cuyos hombres acaban de salir de la clandestinidad y, en cualquier caso, son mucho menos conocidos que los líderes de las formaciones neofranquistas de Alianza Popular, e incluso que los de los partidos de derecha, mucho más tolerados en los últimos años.