Tribuna:

Vendetta del Valencia en Elche

Kempes es argentino y Diarte paraguayo y, sin embargo, el domingo, en Elche, fueron como dos genuinos representantes de la Taula. Kempes y Diarte, con sus goles, hicieron las veces de vengadores. El Elche, que tiene un presidente murciano, ha encabezado el grupo de clubs alicantinos que se han negado a reagruparse en la Federación Valenciana. El Elche ha sido elemento dispersor de las fuerzas valencianistas en contra del señor Rico Pérez, presidente del Hércules, que ha sido quien ha enarbolado la bandera del reencuentro con la propia entidad. Kempes y Diarte hicieron en el nuevo Altabix lo qu...

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Kempes es argentino y Diarte paraguayo y, sin embargo, el domingo, en Elche, fueron como dos genuinos representantes de la Taula. Kempes y Diarte, con sus goles, hicieron las veces de vengadores. El Elche, que tiene un presidente murciano, ha encabezado el grupo de clubs alicantinos que se han negado a reagruparse en la Federación Valenciana. El Elche ha sido elemento dispersor de las fuerzas valencianistas en contra del señor Rico Pérez, presidente del Hércules, que ha sido quien ha enarbolado la bandera del reencuentro con la propia entidad. Kempes y Diarte hicieron en el nuevo Altabix lo que hubieran hecho Vicent Ventura, de no estar tan gordo y Joan Fuster si, además de paisano de Puchades, tuviera debilidades futboleras.El Valencia está en racha; juega, marca goles, suma positivos y va el primero. De momento, es lo que se le puede pedir al desembolso realizado con el respaldo de la banda local y la Caixa d'Estalvis a los que habría que llorar, una vez más, si los abonos no se vendiesen como rosquillas.

Para Pepe Ramos la presidencia del Valencia no tenía más que dos salidas, tras haberse liado la manta a la cabeza; la dimisión con un tremendo fracaso a sus espaldas o la salida en hombros como los grandes triunfadores. Va de momento por lo segundo. En Valencia vuelve a respirarse euforia. Tanta como en los tiempos de la delantera eléctrica. Rep, Diarte y Kempes, tres foráneos, han logrado, de momento, la emoción que le daban a sus partidos Epi, Amadeo,Mundo, Asensi y Gorostiza. Para mayor fortuna, hasta el hijo pródigo, Adorno, se ha vuelto una especie de Pasieguito o Sendra a la hora de dar serenidad a ese centro de campo en el que Saura y Tirapu le hacen la competencia a Marlano Haro.

La fortuna que acompaña ahora al Valencia le viene de perlas esta semana al Madrid. La visita del Stal Mielec, dado el resultado del partido, inicial, no podía tener interés arrebatador para el público, pero los cuatro goles de Elche han añadido ganas de ver fútbol y es, por tanto, presumible, que mañana se registre un lleno absoluto en Mestalla. El público, anfitrión desinteresado, debe volcarse en favor de quien cayó en desgracia a nivel europeo, a causa de un exaltado.

Motivos de euforia hay también en Málaga en donde, al cabo de cuatro jornadas, se han encontrado con un equipo que sabe. reaccionar y que ha sido capaz de ganarle al mismísimo Barcelona, conjunto que se ha apuntado de nuevo a llevar por la calle de la amargura a sus socios. Perder en Santander y en Málaga es dar a entender que no se está por la labor. Para ser campeón hay que puntuar con frecuencia y dos, salidas, teóricamente, aprovechables, han quedado en la nada. Y el Español, segundo en la tabla, lo que resulta una broma más pesada todavía para la mayoría de los aficionados catalanes.

En Segunda División, se ha puesto impertinente el Calvo Sotelo, un club modesto que anuncia guerra, porque otra cosa no significa el empate logrado en Riazor. Donde habrá órdago a, la grande será, sin duda, en Granada. Candi ha logrado una cosa singular; que Miguel Muñoz, siempre un caballero, le haya Perdido toda consideración. Más singular todavía será, probablemente la salida de Candi del club, cosa que no resulta muy aventurado vaticinar. El Granada, después de una serie de desafortunados fichajes, después de haber ingresado en nómina a unas cuantas mediocridades, alguna de las cuales no ha pasado del debut y la despedida, no es capaz de mantenerse con decoro en Segunda. Hay que suponer que Candi se defenderá, como siempre, a costa del entrenador, pero debe tener en cuenta que tras. el cese de Héctor Núñez, un hombre. con sentido común y magnífico preparador, tendrá. que producirse el suyo. En definitiva, el responsable de los males del club es Candi. Y sin atenuantes.

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