Reportaje:

RTVE: poca información y demasiada propaganda

Los telediarios son la esencia de los programas informativos, a los que habría que sumar los semanales en pIan magazine con reportajes, crónicas y entrevistas. Con excepción del sábado, que sólo emite la primera edición, el resto de los días van tres ediciones. El hecho de que a hora de emisión coincida con las de mayor audiencia confirma el privilegio que se otorga al telediario por encima de otros informativos. La semana que nosotros examinamos, del 26 al 31 de julio, pretende ser una muestra representativa de los contenidos informativos propios del programa, cuantificándolos para may...

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Los telediarios son la esencia de los programas informativos, a los que habría que sumar los semanales en pIan magazine con reportajes, crónicas y entrevistas. Con excepción del sábado, que sólo emite la primera edición, el resto de los días van tres ediciones. El hecho de que a hora de emisión coincida con las de mayor audiencia confirma el privilegio que se otorga al telediario por encima de otros informativos. La semana que nosotros examinamos, del 26 al 31 de julio, pretende ser una muestra representativa de los contenidos informativos propios del programa, cuantificándolos para mayor objetivación y con los mínimos márgenes tolerables en cuanto a posibles errores cronométricos. Es cierto que en esta semana se efectuó el viaje de los Reyes a Galicia, y que RTVE, como en ocasiones similares, no sólo opta por incluir estas informaciones en el espacio del telediario, sino que la convierte en permanente noticia del día por triplicado. La información queda saturada y en algunos casos llega a extremos insospechados (el día 26 en la primera edición ocupó el 213 por 100 del resto de la información, o lo que es lo mismo el 68 por 100 del total). Por este motivo hemos decidido tratar aparte del telediario las informaciones relativas a los Reyes, al objeto de no cargar en el balance negativo de TVE lo que más adelante denominaremos propaganda oficial.

El Telediario: caos sistemático

Con este estudio hemos tratado de saber qué proporciones existen en los diversos tipos de información y qué tratamientos reciben. Se trata, en otras palabras, de conocer y descubrir la escala de valores y las jerarquías de noticias en los telediarios. Y si todavía queremos ir más al fondo a comprobar la existencia de una barrera económica e ideológica lo suficientemente fuerte como para no sólo seleccionar los contenidos sino incluso distorsionarlos. Se impone para ello la necesidad de clasificar la información respetando los bloques que ofrece el mismo telediario. Se llega, de esta suerte, a distinguir los siguientes momentos que por regla general se repiten en todas las ediciones: nacional (oficial, sucesos, laboral, etc.), internacional, bolsa, toros, deportes, tiempo, reportajes-encuestas-informes y comentarios-editoriales. El primer defecto de organización viene dado por la falta de una disposición coherente, de un orden lógico en la sucesión de la información.

De los tres telediar los el más importante en cuanto a duración es el de la primera edición, con un mínimo de catorce minutos y un máximo de veintitrés minutos y cincuenta y tres segundos. La segunda edición suele tener aproximadamente cuatro minutos menos y la tercera de seis a siete. Lo lógico sería que a la segunda se le concediese mayor importancia, no sólo por su audiencia, sino también porque a esa hora se han producido más noticias.

La primera edición es la única que da la información de Bolsa. Compensa, por otra parte, con la escasa importancia que concede a lo laboral y a otros posibles asuntos fuera del régimen, tales como partidos políticos, manifestaciones, etcétera. Su esquema informativo es el siguiente: 1, Visita de los Reyes. 2, Información oficial. 3, Internacional. 4, Oficial o, Bolsa. 6, Nacional (en la mayoría de los casos reducida a sucesos). 7, Deportes y 8, Tiempo. Salta a la vista preponderancia de la información oficial. El único día que no se da oficial después de internacional es el sábado 31, debido al tiempo dedicado a la concesión de la amnistía (véase más abajo el tratamiento que recibió el tema). La Bolsa sigue siempre a la información oficicial y precede a la «nacional». El día 29 en la información nacional se mete una cuña de internacional. Se trata de un viejo truco que tiende a suavizar una noticia desagradable o negativa: un atraco en Madrid va precedido de un incendio en París. Véase también más adelante, a este propósito, las interpretaciones relativas al Congreso del PCE. La información que se ofrece, igual mente, el día 30 sobre la Interpol española ocupa una situación muy ambigua, tal vez porque resulta difícil su colocación en uno de los huecos. Se optó por colocarla después de la Bolsa, antes de la noticia sobre la muerte de un misionero español en Angola y 3 segundos antes de facilitar una nota de la Jefatura Superior de Policía sobre los «sucesos» de Villaverde. El hecho de que la información oficial se divida en dos partes hace pensar que no obedece a criterios informativos, sino que se trata de un simple subterfugio para que su duración real pase inadvertida o no parezca tan abultada. introduciendo la internacional por medio se resuelve el problema. Este criterio debe tener tanta solera en la casa, que en algunos casos se demuestra que se trata de un auténtico vicio informativo.

La tercera edición sigue sustancialmente el mismo esquema que la primera. En algunas ocasiones se introducen comentarios antes de deportes. Este telediario concede, en términos generales, escasa importancia a la información nacional no oficial: así, por ejemplo, el día 27 no hay ninguna noticia nacional y el 29 apenas unos segundos. El espacio informativo entre lo oficial y deportes aparece desordenado.

El desorden es todavía más ostensible en la segunda edición. Sólo dos espacios guardan correlación: Toros y Tiempo. Esta edición está concebida prácticamente como una sucesión alternativa de noticias sin ningún orden ni clasificación coherente. La secuencia informativa del día 29 es un claro ejemplo de los extraños criterios que se siguen en esta edición: internacional -nacional -oficial -nacional -oficial -Reyes -oficial -nacional -oficial -nacional -toros -tiempo. Se concede también espacio a algunos reportajes, como el día 27 desde el mar Menor sobre la mojama (?).

La información sobre la visita de los Reyes a Galicia ha supuesto más del 47 por 100 del total de la información de los telediarios. En todos los días y en todas las emisiones ha sido el tema más importante. En 14 ocasiones, de las 16 ediciones estudiadas se le dedicó más tiempo que al resto de las noticias del día. Esta conclusión ha supuesto, además de un desajuste en la hora de emisión, un inflamiento en la duración de los informativos.

La información oficial, estatal o gubernamental, aquella que trata de asuntos relacionados con perso nas o entidades del aparato de Gobierno, equivale al 84,7 por 100 de lo que otros medios llaman «nacional» y alcanzó en la última semana de julio el 38 por 100 del telediario. Normalmente la fuente y el portavoz de la noticia es el mis mo Gobierno.

Casi diariamente cada Ministerio acota su parcela informativa. El presidente, los ministros, se suceden y acumulan en la información con la habilidad de dividirla mediante los sucesos del extranjero. Lo mismo se puede decir de las Cortes, Ayuntamientos de Madrid y Barcelona y otras entidades oficiales. Telediario se convierte por obra de la propia Administración, en un sucedáneo del Boletín Oficial del Estado con su misma monotonía. Es decir, el No-Do familiar de cada día.

Los telepolíticos

El señor Oreja, con su viaje a Roma, ha sido el ministro que más veces ha aparecido en la pequeña pantalla. Le entrevistó la corresponsal de TVE en Roma, y el mismo día, a su llegada al aeropuerto de Barajas fue nuevamente entrevistado. Por número de apariciones siguen el ministro de Relaciones Sindicales, Justicia, Trabajo, Hacienda, Educación y Ciencia y Movimiento.El director general de Seguridad habló por TVE durante más de 7,30 minutos a pesar de que en la edición anterior se había leído la extensa nota de la DGS sobre los atentados del pasado 18 de julio. Del resto de la entrevista destacan: la del director general de Información Diplomática, casi siete minutos; el rector de la Complutense, 5,30 minutos; y el alcalde Viola, tres minutos.

Las desgracias del extranjero

Más de una cuarta parte (28 por 100) de los telediarios se dedica a la información internacional. Por un lo amortigua el exceso de información oficial y por otro da una impresión, continuando la tradición franquista, negativa y casi siempre pesimista de cuanto sucede fuera de España: los estragos del gas de una multinacional y las dificultades par a formar Gobierno en Italia, terremoto en China, crisis económica en Inglaterra, guerra en el Líbano, tribulaciones de Amin, Tanaka encarcelado, enfrentamientos Mozambique-Rodesia disturbios estudiantiles en Colombia, enfrentamientos racistas en Sudáfrica... Sin embargo las noticias que vienen de Estados Unidos por lo general son favorables, a excepción de una alusión al paro juvenil y a los problernas sociales de los negros (información realizada por el corresponsal interino). Todo lo contrario ocurre con el Gobierno laborista inglés. La otra comunicación con los corresponsales de TVE suele estar motivada por comentarios favorables a España. Por ejemplo, el corresponsal de TVE en París sólo ha intervenido una vez para informarnos de la buena acogida que tuvo en Francia la amnistía.

Por fin la amnistía en TVE

Televisión Española, que nunca se ha hecho eco de la petición popular de amnistía, salvo en los comunicados oficiales de la DGS que seguían el gran número de manifestaciones que se han realizado, no ha tenido más remedio que incluirla en sus espacios informativos. Un día antes de que fuera concedida recogió la información de Radio Nacional sobre un informe publicado en la revista Gaceta Ilustrada (el informe venía a decir que la amnistía no debía llegara los delitos de terrorismo). El día 31 extractó los párrafos más favorables, ocultando otros de gran importancia, de los periódicos de la mañana de Madrid y Barcelona. Reforzándolo con las impresiones, casi siempre favorables, de la prensa extranjera. El único español que pudo dar su opinión particular sobre la amnistía fue el ministro de Justicia, en la segunda edición del día 30. La misma entrevista fue repetida en la última edición.El señor Ruiz-Giménez, único político de la oposición que ha hablado esta semana por televisión, fue encuestado a propósito de la firma de la revisión parcial del Concordato, junto con Miret Magdalena y el señor López Martínez. Este último, que ocupó un alto cargo del Ministerio de Justicia, se explayó más que los dos anteriores juntos. Siguiendo las tradiciones de la casa, ni a Ruiz-Giménez, ni a otro político de la oposición se les dio la oportunidad de opinar sobre la amnistía.

Los únicos comentaristas que han aparecido durante esta semana del 26 al 31 de julio han sido: Luis Calvo, estrechamente vinculado al diario A BC que disertó sobre el bajo nivel cultural de la sociedad española, y el periodista especializado en política internacional, vinculado al Opus Dei, Pablo Irazazábal, que lo hizo sobre el presidenciable Reagan y el Partido Republicano de Estados Unidos.

Es de rigor

El tiempo, los deportes, la Bolsa y la información taurina. se llevan una sexta parte del total de información emitida por TVE. A pesar de que la programación dedicaba espacios especiales a todas horas sobre la Olimpiada, los deportes siguen siendo información privilegiada para TVE. La información bursátil se emite en la primera edición y habría que preguntarse qué tipo de audiencia está interesada en las transacciones económicas, los toros en la segunda y «El tiempo» en todas, en ocasiones para rellenar alguna información censurada a última hora.

La otra información

La información relacionada con hechos sociopolíticos apenas ocupa lugar en Televisión. A los partidos políticos se les concede la misma importancia que a los toros y son noticia en casos de llamativa notoriedad. Esta semana: el cambio de nombre del Frente Institucional, el Congreso del Partido Comunista de España y la entre vista del líder de Izquierda Democrática con el presidente Suárez. En el caso del PCE, la información se dio el día 28 en la segunda edición dentro de la información del extranjero, entre las crisis económica de Inglaterra y el accidente de aviación en Checoslovaquia. Nos enteramos que Camacho y Tamames son comunistas. El día 29 la primera edición dedica al Congreso del PCE treinta y cinco segundos, entre el problema del gas tóxico en Italia y la ruptura de relaciones diplomáticas entre Uganda e Inglaterra. El caso inverso lo tenemos el mismo día 29 en la primera edición: ahora interesa dar una noticia internacional dentro del espacio nacional para contrarrestar su efecto negativo, el incendio de un hotel en París precede a un atraco en Madrid.Otras noticias nacionales insignificantes -la salida de vacaciones de los catalanes, información repetida año tras año- ocupan espacios superiores al de los partidos políticos y prácticamente idénticos al de manifestaciones populares y otros hechos. De las provincias, excepto Madrid y Barcelona, sólo se habla cuando las visita el Rey o cualquier miembro de su Gobierno. Las diferencias de los distintos pueblos de España ni se mencionan. La información laboral ocupa el último lugar, con un porcentaje mínimo: el 0,7 por 100. Esta semana han sido noticia los sucesos de Villaverde, que fueron precedidos de la nota oficial de la Dirección General de Seguridad.

TVE no informa del país

Existe también el protagonismo ideológico que excluye de las noticias, de las entrevistas, de las encuestas, de los reportajes y por supuesto de las fuentes de información a aquellos que no comulgan con la ideología dominante. Es obligatorio silenciar cualquier noticia que contradiga al sistema. Pero es muy posible que los telediarios sean una dudosa y discutida interpretación política e ideológica del sistema mismo. A todo esto hay que sumar la pobreza informativa del mismo medio que cuenta con poca información realizada por sus propios redactores y la nula información «en directo», que es el mayor atractivo y ventaja sobre otros medios.El hecho de que la información televisiva sea parcial, minuciosamente seleccionada, -por no mencionar aquellos casos en que se dilata o retrasa intencionadamente-, nos sitúa ante un peculiar entendimiento de la información y su misión en la sociedad. Así resulta con frecuencia que TVE trata de dar su versión sobre aquello que los teleespectadores podrían haber recibido de otros medios.

Partiendo del hecho de que la información de interés sociopolítico es prácticamente nula en los telediarios y que la oficial acapara la casi totalidad de la nacional, se puede afirmar con toda certeza que TVE no informa de la realidad del país y que pasa por ser un instrumento de propaganda y conformación de la opinión pública.

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