La dana pone en jaque la disputa del último gran premio del Mundial de MotoGP
Las trágicas inundaciones en Valencia han inutilizado varios accesos y otras infraestructuras claves del circuito Ricardo Tormo, aunque la pista está en buen estado
La dana que ha afectado estas últimas horas a Valencia ha arrasado también con algunas de las instalaciones del circuito Ricardo Tormo en Cheste, donde en dos semanas está prevista la disputa de la última prueba del Mundial de MotoGP de 2024, clave en su desenlace. Los responsables del trazado han señalado a través de un comunicado que el episodio ha afectado severamente las infraestructuras de acceso y aparcamiento, pero no la pista. Las fuertes corrientes de agua y barro en los barrancos de Sechera y del Poyo, que arrastraron otros elementos de mobiliario urbano, han sido los principales causantes de los daños registrados.
A consecuencia de la tromba de agua, casi un centenar de personas que estaban trabajando en las instalaciones se han visto obligadas a pasar la noche en Cheste, tomando refugio en el gimnasio y las oficinas, lo más alejados posible de las corrientes de agua. “Lo más importante es que todas las personas que estaban en el Circuit están bien, todos han podido pasar la noche a salvo en las instalaciones” ha indicado Nicolás Collado, su director general. El recinto ha empezado este mismo miércoles el proceso de evaluación de daños para determinar cómo el paso de la tormenta va a afectar la posible disputa en garantías de los eventos programados. La organización asume, entre bastidores, que habrá alteraciones en mayor o menor medida.
De un primer vistazo, un enorme socavón ha inutilizado el acceso principal al trazado y complicado la entrada y salida de mercaderías. La próxima semana, la Fórmula E tiene prevista la realización de sus test de pretemporada, que quedan ahora pendientes de la posibilidad de abrir rutas alternativas de acceso al recinto y de la valoración de daños en los garajes y parte del cargamento que ya estaba a resguardo en el circuito. Los cuatro trabajadores de la promoción presentes en el trazado solo han podido entrar y salir del mismo a pie, sin posibilidad de utilizar sus vehículos.
La localidad de Cheste, la más cercana al circuito, se encontraba incomunicada este miércoles al mediodía a través de sus vías principales, con el acceso solo posible a través de vías secundarias según informó la agencia EFE. El alcalde de la localidad, José Morell, apuntó que las comunicaciones son muy complicadas dados los problemas en el suministro de luz y la caída de los servicios de internet y telefonía.
MotoGP, a través de sus redes sociales, ha publicado un mensaje de apoyo a las víctimas de la tragedia, donde también ha explicado que están en contacto con las autoridades competentes para asistir en las tareas más urgentes en la zona. Dorna, la promotora española que explota los derechos comerciales de la competición, no ha emitido por ahora ningún comunicado oficial al respecto.
La asociación de equipos del certamen (IRTA), en una misiva interna, ha informado a los equipos y las fábricas que participan en el campeonato sobre la intención de la promotora y las autoridades locales de que la última cita del Mundial de 2024 se dispute en las fechas previstas, entre el 15 y 17 de noviembre. “Sería insensible e irresponsable hablar del evento en este momento. El enfoque debe seguir estando en ayudar a los afectados”, subraya la IRTA, sin embargo, en su carta.
Jorge Martín y Pecco Bagnaia, separados por 17 puntos a falta de dos grandes premios para la conclusión del certamen, disputan este fin de semana el penúltimo asalto del campeonato, un GP de Malasia donde el español tiene opciones matemáticas de proclamarse campeón. Para ello, necesitará aventajar en 38 puntos al italiano al término de la carrera del domingo en Sepang. Aunque queda en un segundo plano dada la dimensión de la tragedia en Valencia, la posible cancelación del gran premio añade un factor externo fuera de control a la batalla deportiva dentro de la pista.