Barcelona despega ante el Zalgiris con Brizuela
El Baskonia vence al Olympiacos en el partido 300 del Buesa Arena
El partidazo del donostiarra Darío Brizuela en el Palau, arrastró a su equipo a la victoria frente a un pegajoso Zalgiris (91-73) que aguantó más de 30 minutos. El base del Barcelona dirigió a su equipo con maestría cuando llegaron los momentos de zozobra en la cancha y además afinó la puntería más que nunca para triplicar su máxima anotación en un partido de la Euroliga. Cuando dudaban sus compañeros le buscaban a él, que anotó siete de sus ocho tiros de dos, además de ...
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El partidazo del donostiarra Darío Brizuela en el Palau, arrastró a su equipo a la victoria frente a un pegajoso Zalgiris (91-73) que aguantó más de 30 minutos. El base del Barcelona dirigió a su equipo con maestría cuando llegaron los momentos de zozobra en la cancha y además afinó la puntería más que nunca para triplicar su máxima anotación en un partido de la Euroliga. Cuando dudaban sus compañeros le buscaban a él, que anotó siete de sus ocho tiros de dos, además de tres lanzamientos triples.
Brizuela fue el faro que se encendió cuando cayó la niebla sobre el Palau Blaugrana, cuando parecía que el Barcelona despegaba en el primer cuarto con 16 puntos de diferencia. Después de un comienzo fulgurante (13-0), el Zalgiris no carburaba como debía y acabó el primer cuarto casi noqueado (26-12). Sin embargo, no se dejó ir el equipo lituano y consiguió, a base de intensidad en defensa y los puntos de Evans, llegar a ponerse por delante (30-32) tras el apagón momentáneo del Barcelona. Fue entonces cuando aparecieron primero Satoransky y después Brizuela, para aportar su pegada y conseguir que el marcador al descanso sonriera a su equipo (44-37).
En la segunda parte, los hombres de Grimau desarrollaron un ejercicio de paciencia en los primeros diez minutos, para ir despegándose poco a poco de un Zalgiris que no daba tregua. Pese a la actuación errática de los árbitros, los azulgrana no se desesperaron y mantuvieron a su rival unos pasos por detrás. Para entonces ya había aparecido el Brizuela estelar, que se destapó del todo en el tramo final, cuando desfondado ya el Zalgiris, se hizo el amo del partido. La ventaja se amplió, empezó a rondar los veinte puntos y Grimau les concedió minutos a las jóvenes promesas, que tienen muy buena pinta.
Baskonia doblega al Olympiacos
No había mejor forma de celebrar una efeméride que con un triunfo, y el Baskonia lo hizo en el Buesa Arena, donde le ganó con solvencia al Olympiacos (80-69) en el partido número 300 de la Euroliga que se jugaba en el coliseo vitoriano, una cifra a la que solo habían llegado tres pabellones con mucha solera, el Palau Blaugrana de Barcelona, el OAKA Arena de Atenas y el Pabellón de la Paz y la Amistad en El Pireo.
El Baskonia jugó un partido serio, en el que trató de dominar y correr cuando podía, y lo decantó en los diez minutos finales. El acierto anotador de Howard (21 puntos) en la segunda parte junto al dinamismo de Moneke resultaron fundamentales para el triunfo vitoriano. A pesar de los 19 puntos de Canaan, que causó terror desde la línea de triples, el equipo de Ivanovic supo mantener el tipo para sumar su undécima victoria y mantenerse cerca de los puestos que dan acceso a los cuartos de final.
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