España apunta al podio de los Juegos de París en natación artística

El equipo acaba cuarto en la final libre y concluye los Mundiales de Doha como el tercero mejor puntuado tras China y Estados Unidos

El equipo español completa una figura en apnea, durante la rutina de la final libre, este viernes.MARKO DJURICA (REUTERS)

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

El equipo español de natación artística cumplió con su objetivo mínimo en los Mundiales de Natación de Doha clasificándose para los Juegos de París tras quedar sucesivamente quinto, segundo y cuarto en las tres finales de rutina acrobática, técnica y libre sucesivamente. Las nadadoras dirigidas por Mayuko Fujiki obtuvieron 302,82 puntos en la final libre de este viernes. Completaron un ejercicio de gran belleza y sincronización que, sin embargo, no alcanzó la velocidad y los niveles de potencia que imprimieron Estados Unidos (bronce), Japón (plata) y China (oro). La puntuación global, sin embargo, coloca a España en tercera posición tras China y Estados Unidos, seguida a un punto por Japón. Si los equipos evolucionan al ritmo más o menos previsto, China se presentará en los Juegos de París como gran favorita y las otras tres selecciones se disputarán la plata y el bronce.

“Estamos contentas porque hemos hecho todo lo que estaba en nuestras manos y hemos progresado como equipo”, dijo Iris Tió. “El objetivo principal está cumplido. Ahora nos queda medio año para mejorar las rutinas”.

Rusia, penalizada por una sanción que le impide presentar equipos a raíz de la guerra de Ucrania, y el empobrecimiento de la propia Ucrania, que quedó eliminada tras cometer tres errores en la última final, ha despejado el camino a los aspirantes a medallas olímpicas. Rusia, la potencia hegemónica secular, y Ucrania, su hermana menor, ocuparon el primero y el tercer puesto del podio en los Juegos de 2021. La ausencia de las magníficas atletas eslavas, hijas de una cultura gimnástica y de ballet sin parangón, abrió un vacío en el que China se estableció con naturalidad.

China, asesorada por la exseleccionadora española Ana Tarrés, sale de Doha convertida en la favorita absoluta para conquistar el campeonato olímpico. A menos que un accidente, un fallo clamoroso, cambie las condiciones del torneo previsto para París, las puntuaciones obtenidas por las chinas en el Mundial las sitúan en una órbita aparte. Para prueba, el resultado de la final libre: 339 puntos lograron las chinas este viernes, a una distancia sideral de las siguientes, las japonesas, con 315. La batalla por los despojos del naufragio eslavo reunirá en otro corral a Estados Unidos (814 puntos en el global de Doha), España (798), Japón (797), Italia (756) y Canadá (738). El prólogo mundialista alumbra a los contendientes del próximo verano. Después de una década fuera del podio olímpico, España se encuentra ante una gran oportunidad.

Puedes seguir a EL PAÍS Deportes en Facebook y X, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.

Sobre la firma

Más información

Archivado En