La UEFA confirma la participación provisional del Barcelona en la Liga de Campeones
El máximo organismo del fútbol europeo permite al conjunto azulgrana jugar la próxima edición de la Champions League aunque se reserva una opción de poder excluirlo en un futuro
El órgano de apelación de la UEFA ha hecho oficial esta tarde, a través de un comunicado, la admisión del FC Barcelona para jugar la Liga de Campeones de esta temporada 2023/2024 después de ser investigado por el Caso Negreira. El anuncio se ha hecho oficial en el día de hoy pero el club azulgrana conocía la decisión de la UEFA desde finales del mes de junio, cuando ...
El órgano de apelación de la UEFA ha hecho oficial esta tarde, a través de un comunicado, la admisión del FC Barcelona para jugar la Liga de Campeones de esta temporada 2023/2024 después de ser investigado por el Caso Negreira. El anuncio se ha hecho oficial en el día de hoy pero el club azulgrana conocía la decisión de la UEFA desde finales del mes de junio, cuando los dos inspectores designados para la investigación por el organismo rector del fútbol europeo no encontraron ningún motivo para sancionar al club catalán.
A pesar de que el Barcelona evita el mayor castigo posible, que era la suspensión de una temporada de cualquier competición europea que hubiese supuesto una pérdida de ingresos importante, la UEFA avisa en un comunicado que el club tendrá que informar de los avances de la investigación del Caso Negreira: “El FC Barcelona tiene la obligación de mantener informados a los Inspectores de Ética y Disciplina (EDI) del avance de las investigaciones en curso de forma proactiva y de facilitar a los EDI todos los documentos e información que soliciten”. Además, el organismo europeo añade que la investigación sigue en curso y se reserva una futura decisión sobre la admisión o exclusión de las competiciones de clubes de la UEFA.
“Los procedimientos relativos a la admisión del FC Barcelona a las competiciones de clubes de la UEFA 2023/2024 quedan suspendidos y podrán ser reanudados, de oficio, o a petición de los EDI encargados del caso. Se invita a los EDI a cargo del caso a continuar y finalizar su investigación y enviar un nuevo informe al Órgano de Apelación de la UEFA cuando consideren que se debe evaluar la admisión/exclusión del FC Barcelona”, así rezaba el comunicado publicado esta tarde. que permite al club azulgrana olvidarse de una cuestión que preocupaba a la afición y directiva, pero que tendrá que seguir teniendo en cuenta de cara a las próximas temporadas.
Desde el inicio del Caso Negreira, la UEFA se mostró muy tajante. Aleksander Ceferin, presidente de UEFA, había manifestado meses atrás que el caso Negreira era “de lo más grave” que había visto en el fútbol. De hecho, el reglamento le permitía al organismo europeo excluir a la entidad azulgrana por un año. El artículo 4.g del código disciplinario de la UEFA señala: “Si sobre la base de todas las circunstancias y la información disponible, la UEFA concluye a su entera satisfacción que un club ha sido directa y/o indirectamente involucrado desde la entrada en vigor del artículo 50 (3) de los Estatutos de la UEFA, es decir, del 27 de abril de 2007, en cualquier actividad dirigida a arreglar o influir en el resultado de un partido a nivel nacional o internacional, la UEFA declarará que dicho club no podrá participar en la competición. Esta inelegibilidad es eficaz solo para una temporada”.
Sin embargo, la plana mayor del FC Barcelona, con Joan Laporta a la cabeza, llevó a cabo conversaciones directas con la UEFA para explicar que no hubo corrupción arbitral: “Se ha querido utilizar el caso Negreira para que no participáramos en la Champions. Pero no se nos puede condenar antes de juzgarnos”, defendió en su momento un Laporta que hace poco confirmó que la no participación hubiera sido un gran varapalo para el club: “No participar en ella (la Liga de Campeones) habría sido una desgracia a nivel económico y social de imagen. Era un momento muy delicado y haberlo superado nos hace ser más candidatos a ganarla”. La decisión adoptada por la UEFA permite al club azulgrana olvidarse de una cuestión que preocupaba a la afición y directiva, pero que tendrá que seguir teniendo en cuenta de cara a las próximas temporadas hasta que se conozca la sentencia sobre el Caso Negreira.
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