Los Lakers salen del letargo y ganan a Golden State por 30 en una gran noche de Davis y Russell
Los angelinos aplastan a sus rivales pese a que LeBron James no tiró a la canasta en un cuarto por primera vez en unos playoffs
Ha sido otra noche histórica para LeBron James. Y no por lo que se cree. El hombre que ha hecho costumbre de las hazañas en 20 años en la NBA ha tenido este sábado uno de sus arranques más aburridos de su carrera. En la misma temporada en la que arrebató a Kareem Abdul-Jabbar el récord de puntos, el número 6 registró esta noche su primer cuarto de playoffs sin un solo tiro. James corrigió el rumbo y evitó el desastre en la segunda parte, i...
Ha sido otra noche histórica para LeBron James. Y no por lo que se cree. El hombre que ha hecho costumbre de las hazañas en 20 años en la NBA ha tenido este sábado uno de sus arranques más aburridos de su carrera. En la misma temporada en la que arrebató a Kareem Abdul-Jabbar el récord de puntos, el número 6 registró esta noche su primer cuarto de playoffs sin un solo tiro. James corrigió el rumbo y evitó el desastre en la segunda parte, impulsando a los Lakers a una aplastante victoria de 127-97 sobre Golden State. Durante el arranque, sin embargo, el astro de los cuatro campeonatos inquietó a muchos con una pregunta: ¿Pueden los Lakers derrotar a los Warriors sin LeBron?
El triunfo de esta noche adelanta 2-1 a los Lakers en la semifinal del Oeste, que continúa el lunes aquí. LeBron apenas compareció en el cuarto de arranque, donde tuvo dos rebotes y tres asistencias. Su equipo iba cayendo al cierre de ese periodo por siete puntos. Pudo romper el cero bien entrado el segundo cuarto desde la línea de tiros libres. Salió del letargo cobijado por el público, entre el cual se encontraba su hijo Bronny, de 18 años, quien ha elegido este sábado a los Troyanos de la USC para despegar su carrera en el baloncesto colegial (es el primer James que va a la universidad).
Segundos después de los tiros de castigo, James convirtió un contraataque a gran velocidad. Puso fin a hibernación con un triple. Para el cierre del tercer cuarto, era el astro conocido por todos. Cerró la noche con 21 puntos, al igual que D’Angello Rusell. “Me enfoqué en el tablero. No lo planee así, pero así fue el juego. Me involucré cuando lo necesité”, afirmó James, vestido con un verde de los Celtics, en la conferencia de vestidores.
El mismo día de la coronación de Carlos III, la realeza del entretenimiento dio la bienvenida a la llegada de la serie a Los Ángeles. El encuentro de este sábado ha sido una pasarela de celebridades. Jack Nicholson dejó el ostracismo hace algunos días para ver al equipo 17 veces campeón. Hoy ha sido Leonardo DiCaprio quien intentó mantener un bajo perfil viendo el partido con una mascarilla negra y una gorra de los Dodgers del mismo color. Dustin Hoffman fue el representante del viejo Hollywood y Kim Kardashian del nuevo. Al lado de la empresaria e influencer, sentada junto a la banca de los Lakers, estaba el actor Michael B Jordan. También estuvieron Adele, el comediante Kevin Hart, Woody Harrelson, Don Cheadle. Anthony Kiedis, el vocalista de los Red Hot Chili Peppers y Rob Zombie eran las estrellas musicales en casa, donde las entradas más económicas se cotizaban en 500 dólares.
Anthony Davis fue, con 25 puntos, el máximo anotador de los angelinos. Atrapó 13 rebotes y bloqueó cuatro disparos. Davis está llamado a ser la figura en torno a la que construyan el equipo una vez que se apague la leyenda de James en amarillo y morado. Con un juego como el de esta noche, el pívot se ha sumado a Shaquille O’Neal y Abdul-Jabbar como jugadores de los Lakers con más de 25 puntos, diez rebotes y al menos cuatro bloqueos. AD lleva siete dobles-dobles en la actual postemporada.
Cuando James despertó, los Lakers se impusieron con facilidad a los Warriors, quienes sufrieron otra noche de insubordinaciones con cuatro faltas técnicas en la primera mitad, flagrantes y 15 pérdidas de balón entre el segundo y tercer cuarto. En total, entregaron la pelota 19 veces, lo que dio a los Lakers la oportunidad de convertir 27 puntos. Como sucedió en el primer juego de la serie, la defensa de Golden State regaló a sus rivales 37 viajes a la línea de tiros libres. De esa distancia, los Lakers encestaron 28 frente a los 12 de los Warriors.
El partido terminó prácticamente en el penúltimo cuarto, cuando los Warriors iban atrás por 18. Steve Kerr dio por concluida la noche entonces y retiró a Stephen Curry (23) y Klay Thompson (15) para darles descanso. Los splash brothers se combinaron para siete triples de 19 tiros. Curry metió solo nueve de 21 dentro del área. Hubo un momento del segundo periodo, donde su equipo falló 10 de once tiros consecutivos. No osbtante, uno de los mejores momentos del partido fue un póster que Andrew Wiggins (16) hizo sobre Anthony Davis en el tercer cuarto. Después del mate, el alero de Golden State, quien tuvo nueve rebotes y cuatro asistencias, sacó la frustración con un gran grito. Su desahogo no pudo evitar que cayeran por 30.
D’Angelo Russell ha tenido este sábado su mejor partido de la serie. En el primer cuarto, Davis, Dennis Schroder y él fueron los únicos Lakers que marcaron. Hizo once en el arranque y cerró la primera mitad con 21. Esta tarde, antes de que se pusiera en movimiento el balón en la cancha del estadio Crypto, Steve Kerr, el entrenador de los Warriors, dijo que se “ha valorado injustamente” el paso que Russell tuvo por San Francisco en 2019-2020. Una lesión le impidió encajar del todo junto a Curry y Thompson, para lo que había sido llevado a la bahía. Su juego ha tenido cierto sabor a venganza.
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