El Real Madrid revive en Belgrado
El equipo blanco fuerza el quinto partido de los cuartos de la Euroliga tras otra victoria en la pista de Partizán (78-85) y la serie se decidirá el próximo miércoles en el WiZink
Una apasionante serie de cuartos de la Euroliga se merecía un quinto partido. El Madrid conquistó de nuevo Belgrado y forzó el desenlace de la serie el próximo miércoles a las 21.00 en el Wizink en busca de la Final Four de Kaunas. Nunca ningún equipo ha remontado un 0-2 en una eliminatoria de la Copa de Europa, pero el Madrid se ha ganado opositar a la gesta. Dos veces venció el Partizán en la capital española, y dos veces golpeó el conjunto de Chus Mateo en Serb...
Una apasionante serie de cuartos de la Euroliga se merecía un quinto partido. El Madrid conquistó de nuevo Belgrado y forzó el desenlace de la serie el próximo miércoles a las 21.00 en el Wizink en busca de la Final Four de Kaunas. Nunca ningún equipo ha remontado un 0-2 en una eliminatoria de la Copa de Europa, pero el Madrid se ha ganado opositar a la gesta. Dos veces venció el Partizán en la capital española, y dos veces golpeó el conjunto de Chus Mateo en Serbia cuando estaba contra las cuerdas. Una nueva final se avecina.
Un manto de flores vistió la pista antes del inicio del encuentro. Era el homenaje a los fallecidos y heridos en el tiroteo en una escuela de Belgrado del día anterior. El balón comenzó a botar en medio de muchas emociones a flor de piel. Curiosamente, fue el anticlímax para el Partizán, acostumbrado a convertir cada cita en una caldera. El encendido ambiente de otras noches se había congelado, las lágrimas habían sustituido a los gritos, y el conjunto de Belgrado tardó en entrar en calor. Las penetraciones de Musa y Hanga dieron las primeras rentas al Madrid, más cómodo en la defensa ante el descenso de revoluciones de los hombres de negro. Dos pérdidas de Lessort simbolizaron ese agarrotamiento local. El cero del marcador no lo borró el Partizán hasta pasados los tres minutos, y dos triples de Hanga y otro de Musa desde la misma esquina abrieron un resquicio serio (7-17). Los blancos ponían el cerrojo con Tavares (nombrado mejor defensor de la ACB por tercera vez seguida) y corrían a gusto. La atmósfera en el Stark Arena estaba lejos de ser un infierno para los de Chus Mateo. El luto había ensombrecido la fiesta del baloncesto.
Otro bingo exterior de Hanga (11 puntos en el primer cuarto) estiró la renta hasta el 13-24. En el peor escenario, el Madrid recorría el tramo más cómodo de la eliminatoria. La amplitud de su plantilla permitía al técnico rotar sin bajar el listón. Cinco triples, tantos aciertos como canastas de dos, fundieron al Partizán en esos 10 minutos iniciales (15-27).
Sin el volcánico Punter (volverá para el quinto duelo), el Partizán necesitaba con urgencia un agitador. El Madrid mantuvo los pies firmes con Sergio Rodríguez encestando desde la misma baldosa que sus colegas en el perímetro, Hanga perforando la muralla y Tavares en todas partes (21-32). Fue Papapetrou quien espoleó a la tropa también a distancia porque por dentro Lessort chocaba con las torres blancas. El relevo lo tomó Leday con muy buenos movimientos en la zona y la fiebre que precisaba el choque. El pabellón iba subiendo de temperatura. El paso de Tavares por el banquillo (Randolph cargó con tres faltas como sustituto) alimentó la reacción local para atar un 11-2 y volver a la vida (32-34). El Madrid sonreía si podía acelerar, pero en estático le costó hallar los huecos antes del descanso. Llull se vistió de veterano para ganarse tres tiros libres ante Madar (42-45). Un respiro para los blancos.
Latido a latido, Belgrado volvía a ser Belgrado. La grada ya empezaba a jugar y cada acción se masticaba mucho más. El Madrid buscaba los caminos que llevaran a Tavares. El caboverdiano era inexpugnable sobre todo bajo su aro. En la línea ofensiva, solo Musa sumó de jugada para los blancos en más de seis minutos. Tampoco estaba el Partizán para tirar cohetes, errático y precipitado en el tiro lejano ante la zona blanca. La tropa de Obradovic se aupó un dedo por delante (51-49) casi por inercia. Al rescate blanco acudió, quién si no, Tavares, diana de los pases de sus compañeros y un seguro atrás. Siete puntos seguidos del tallo y un triple de Deck oxigenaron al Madrid (55-61).
El Partizán no tenía otro recurso que sujetar el cuchillo entre los dientes. Papapetrou y un enchufado Leday comandaban los arreones, pero el equipo de Belgrado fallaba tanto desde el triple como desde el tiro libre (66-71). Los blancos parecían conservar la calma pese a las dudas sobre ciertas decisiones arbitrales. Leday seguía sumando para apretar el resultado en otra noche a todo o nada. Momento para Sergio Rodríguez, curtido en mil batallas. Del ring salió cojeando Deck por una lesión en la rodilla izquierda (74-78 a 2m 10s). El Partizán había remado hasta la orilla, pero a la hora de los valientes el Madrid exhibía más galones. Un titánico Tavares (15 puntos y siete rebotes) emergió entre una selva de brazos para apuntarse un dos más uno a falta de un minuto que selló el triunfo visitante. La quinta partida de ajedrez decidirá el miércoles quién viajará a la Final Four de Kaunas.
PARTIZÁN, 78; REAL MADRID, 85
Partizán: Madar (6), Nunnally (2), Trifunovic (3), Leday (25) y Lessort (11) —quinteto inicial—; Andjusic (7), Smailagic (0), Exum (6), Papapetrou (18).
Real Madrid: Williams-Goss (6), Hanga (15), Musa (14), Deck (14) y Tavares (15) —quinteto inicial—; Hezonja (5), Sergio Rodríguez (8), Rudy Fernández (0), Randolph (3), Cornelie (0) y Llull (5).
Árbitros: Vilius, Lottermoser y Paternico. Sin eliminados.
Stark Arena de Belgrado. 20.091 espectadores. 2-2 en la serie de cuartos. El quinto partido, el miércoles en Madrid. En el otro duelo del jueves, Maccabi, 104; Mónaco, 69 (2-2 en la serie). Este viernes, Fenerbahçe - Olympiacos (19.45; 1-2 para Olympiacos). El Barça, ya clasificado tras derrotar por 3-0 al Zalgiris.
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