Jonas Vingegaard: “Estoy feliz con la persona que soy, y creo que Pogacar es también feliz por cómo es”

Entrevista con el ganador del pasado Tour, que ha empezado su temporada ganando en O Gran Camiño y se prepara para un nuevo duelo con Tadej Pogacar en julio: “Admiro a Tadej. Es un gran ciclista, pero somos muy diferentes tanto mentalmente como físicamente”

Jonas Vingegaard, tras la entrevista, ante una gran foto de la Ribeira Sacra.IRAIA CALVO

Parece nada Jonas Vingegaard, vestido de chándal y con la mascarilla FFP2 —”me gusta ser muy cuidadoso con todo”, dice—, delgadito, poca cosa, casi un niño paliducho que, terminada la entrevista, se quita la mascarilla y posa divertido para la fotógrafa ante una foto mural del Cabo do Mundo, el Miño y su meandro en la Ribeira Sacra que, horas antes había escalado bajo la nieve. Sobre la bicicleta, el ganador del Tour de 2022, un danés de Hillerslev, en el norte de Jutlandia, de 26 año...

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Parece nada Jonas Vingegaard, vestido de chándal y con la mascarilla FFP2 —”me gusta ser muy cuidadoso con todo”, dice—, delgadito, poca cosa, casi un niño paliducho que, terminada la entrevista, se quita la mascarilla y posa divertido para la fotógrafa ante una foto mural del Cabo do Mundo, el Miño y su meandro en la Ribeira Sacra que, horas antes había escalado bajo la nieve. Sobre la bicicleta, el ganador del Tour de 2022, un danés de Hillerslev, en el norte de Jutlandia, de 26 años, se transforma en un gigante de la ruta congelado, quizás el príncipe Hans de Frozen. Ha terminado su primer día de competición del año, una etapa que se suspendió por la nieve, y, por supuesto, está encantado. Quizás intuya ya, tan fuerte se siente después de varias semanas de concentración en el Teide, que 24 horas después, el viernes, se impondría en la llegada al viacrucis del Monte Trega —”una pequeña Planche des Belles Filles”, dice, hablando de la durísima subida del Tour en la que comenzó su gran duelo con Tadej Pogacar el pasado Tour— y volvería a vestir, siete meses después de los Campos Elíseos, un maillot amarillo de líder.

Pregunta. En España sorprendió mucho que usted decidiera empezar su año corriendo en O Gran Camiño, una carrera nueva, sin mucho historial ni gran participación… ¿Buscaba eso, una carrera de segunda, sin rivales importantes, para correr más tranquilo?

Respuesta. No, no. En el Jumbo analizamos el calendario pensando cuál sería la mejor preparación para la París-Niza y vimos esta carrera y pensamos que sería bueno hacerla. Ya estoy en buena forma y solo necesito afinarla un poco. Pensamos que esta carrera sería la carrera óptima para hacerlo.

P. ¿Estaba impaciente por volver a la competición?

R. Sí, sí, no corrí mucho el año pasado después del Tour, pero ahora tengo muchas ganas de mostrar que estoy bien y volver a competir. He estado en una concentración tres semanas en el Teide y ahí sientes como si solo te estuvieras preparando y preparando mientras los demás ya compiten. Siempre estás como esperando impaciente para demostrar lo bien que está.

P. Y Pogacar exhibiéndose todos los días en Andalucía…

R. Ya le vi, ya, se le ve muy fuerte, sí. Estuvo impresionante. Ahora me toca a mí hacerlo mejor para derrotarle ahora en la París-Niza [5 a 12 de marzo] y también, por supuesto, más tarde en el Tour de Francia.

P. ¿Con la perspectiva del Tour, tan lejos está julio, es inteligente correr como Pogacar, tan agresivo, derrochando tanto cada día?

R. Todo lo que hacemos, cada carrera que hago, cada campo de entrenamiento que hago, es también una preparación para el Tour de Francia. Por supuesto, también quiero ganar otras carreras además de una sola carrera. Pero incluso si alguien es mejor que yo ahora, aún sabemos que puede ser diferente en julio. Somos muy distintos y por eso, a fin de cuentas, hay una gran competencia entre nosotros.

P. ¿Pero no le alegra pensar que Pogacar es un derrochador?

R. Sé que a mí esa forma de correr no me iría bien, pero parece que a él sí que le funciona, como se vio los dos años anteriores. Seguramente a él no le iría bien seguir mi modelo. Cada ciclista somos un mundo.

P. En el Tour pasado quizás él pagó en los Alpes lo mucho que había gastado en las primeras etapas, peleando con Wout van Aert…

R. Ajá. Él estuvo todo el tiempo peleando por segundos de bonificación. A él le gusta mucho correr así. Creo que en el fondo le da más motivación, así que no es malo para él correr como lo hace.

P. Usted es uno de los pocos grandes ciclistas que sigue viviendo en su pueblo, no en Andorra o Mónaco, como la mayoría. ¿Necesita estar cerca de sus raíces?

R. Me gusta vivir en Dinamarca. Me gustan todos los países, pero, claro, Dinamarca es mi país y es algo muy especial seguir allí. No paso allí mucho tiempo en realidad, pero me gusta estar allí, con mi familia y mis amigos.

P. Da la impresión, también, de que usted no es tan gregario como otros ciclistas, que necesitan entrenarse en grupo, estar siempre acompañados…

R. Así es. Cuando estoy en Dinamarca salgo casi siempre solo. No tengo ningún problema con entrenarme solo o estar solo.

P. De hecho, parece que hasta disfruta más.

R. Me gusta salir solo, pero también voy en grupo con mis compañeros de equipo. Paso tanto tiempo en los campos de entrenamiento del Jumbo que un poco de soledad me va bien.

P. ¿Cómo vivió eso de convertirse súbitamente en un héroe nacional en Dinamarca?

R. Fue un buen cambio, sí, pero, afortunadamente, vivo en un pueblo muy pequeño, en el que todos nos conocemos desde siempre, y allí no cambió nada. Claro, que cuando voy a una ciudad grande soy más conocido que antes.

P. ¿Se siente incómodo cuando se ve reconocido por las calles? ¿Anda como si pensara que todo el mundo está pendiente de lo que va a hacer?

R. ¿Incómodo? Yo no diría tanto. No creo que la sensación pudiera expresarse así. No es ningún problema el sentirme reconocido y cosas de ese tipo, aunque pienso que quizás, como usted dice, soy una de esas personas que preferirían... ¿Cómo diría yo?

P. ¿Una vida más anónima?

R. Eso es. Sería feliz llevando una vida hogareña y no siendo reconocido, pero, claro, tengo talento como ciclista y soy famoso, y eso es parte del juego, y podemos decir que no me agobia.

P. Thibaut Pinot ha dicho que menos mal que no ha ganado el Tour, porque ello le habría cambiado la vida de una manera que no le gustaría.

R. Creo que es verdad. Tu vida cambia mucho. Te haces famoso y en todo el mundo, en Dinamarca, en España, te conocen todos. Pero eso es así, y, en cierta manera, ya lo sabes antes de decidir que quieres ganar el Tour. Uno siempre sabe si va a ser capaz de controlar las consecuencias, y si sabes que no vas a poder manejarlo no deberías intentar ganar el Tour. No tengo ese problema. Puedo controlarlo.

P. Si usted no quería ganar el Tour para ser famoso o sentirse importante, y quizás tampoco por dinero…

R. Bueno, un poco sí por dinero, claro…

P. ¿Cuál es su motivación más profunda, de todas maneras?

R. Bueno, el Tour es la principal carrera del ciclismo. El ciclismo es mi pasión y ser capaz de ganar la principal carrera de lo que te apasiona es… No busco figurar en los libros de historia o cosas así. Se trata de mí, de yo mismo, de lo feliz que me hace ganar la carrera ciclista más importante, uno de los mayores eventos deportivos del mundo.

P. En septiembre, cuando usted llevaba dos meses sin correr casi después de ganar el Tour, su director, Frans Maassen, dijo que le estaba costando asimilar lo que significaba ganarlo, y muchos medios hablaron de que usted sufría una depresión causada por el estrés en el que había entrado… ¿Leyendo aquello sintió que se invadían su vida, su intimidad?

R. No, no sentí amenazada mi intimidad, lo que sentí fue que había habido una reacción exagerada. No sé quién fue el primero, pero alguien hizo una montaña de un grano de arena. Claro que después de ganar el Tour necesitas descansar, aislarte de todo, pero eso no tiene nada que ver con una depresión.

P. ¿Y cree que los que escriben que no es más que un ganador de transición y no un gran campeón o que solo ganó por la estrategia de su equipo buscan atacarle, hacerle daño, sin más?

R. No sé qué pretenden Tendrá que preguntarle a los que escriben eso supongo. Quiero decir que, no sé cuál es la palabra inglesa para eso [la entrevista se desarrolla en inglés], pero la gente puede decir lo que quiera, todo el mundo tiene derecho a hacerlo, y no me molesta lo más mínimo lo que la gente pueda pensar o decir. Claro que creo que el equipo tiene un gran peso en mi victoria, y que no habría sido capaz de ganar el Tour sin el equipo, pero el equipo tampoco habría ganado sin mí.

P. Supongo que se trata de hacer todo lo posible para ganar la carrera que más importa, no de que a la gente le guste o no cómo lo hace…

R. Eso es. Estoy de acuerdo. Si solo pudiera ganar una carrera al año durante el resto de mi vida, y tuviera que elegir, elegiría, sin dudarlo, el Tour.

P. Todo en su equipo parece superestudiado, como por ejemplo, su programa de aquí al Tour, cuatro carreras de una semana, 27 días de competición, ninguna clásica de un día…,

R. Hicimos un plan en el que no entraban las clásicas de un día, sí. Lo hemos pensado mucho y lo hemos hablado este invierno. Hemos visto que yo no rindo bien en carreras de un día, así que decidimos borrarlas de mi programa este año. En los próximos seguramente volvamos a incluirlas.

P. La afición parece preferir el perfil de ciclistas como Pogacar, que ganan todo tipo de carreras todo el año… ¿Le gustaría más ser como él o está feliz con la persona que es usted?

R. Estoy feliz con la persona que soy [se ríe como diciendo, pero qué pregunta más tonta]. Admiro a Tadej, por supuesto. Es un gran ciclista. Somos muy diferentes tanto mentalmente como físicamente. Soy feliz por como soy y creo que él es también feliz por cómo es.

P. ¿Hay mucha diferencia entre preparar un Tour como aspirante a ganarlo por primera vez a hacerlo como el ganador del año anterior?

R. La presión que sientes es muy distinta. Ni mi equipo ni yo habíamos ganado el Tour antes y ahora que lo hemos ganado podríamos todos, no diría tanto como relajarnos y estar más tranquilos, pero aunque no volvamos a ganar el Tour nunca podremos siempre decir que lo hemos ganado ya, y eso nos quita presión. Claro que como el campeón del año anterior sufro mucha presión, pero siempre será menos presión que antes porque ya lo he ganado.

P. Y quizás podría haberlo ganado también en 2021, cuando hizo sufrir a Pogacar en el Mont Ventoux, si no hubiera tenido problemas de rodilla…

R. Bueno, sí, la rodilla era mi talón de Aquiles, y tuve problemas ese Tour, pero no estoy seguro de que le hubiera ganado sin ellos. Sí que le di duro en el Ventoux, pero, de todas maneras, creo que mereció ganar él. Era mi primer Tour, no creo que pudiera ganarlo de ninguna manera.

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