Red Bull se pasó gastando en el Mundial de Fórmula 1, pero poco

La FIA declara culpable al equipo de Verstappen de una infracción menor del techo gasto, pero aún no fija una sanción

Verstappen, en el podio del Gran Premio de Japón.AFP7 vía Europa Press (AFP7 vía Europa Press)

La Federación Internacional del Automóvil (FIA) falló este lunes en contra de Red Bull, a quien declaró culpable de una falta considerada “menor”, por haber superado los 145 millones de dólares establecidos como límite presupuestario para cada uno de los equipos que participó en el Mundial de Fórmula 1 de 2021 (alrededor de 130 millones de euros del momento). Junto a la escudería energética, que el pasado domingo revalidó el título de ...

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La Federación Internacional del Automóvil (FIA) falló este lunes en contra de Red Bull, a quien declaró culpable de una falta considerada “menor”, por haber superado los 145 millones de dólares establecidos como límite presupuestario para cada uno de los equipos que participó en el Mundial de Fórmula 1 de 2021 (alrededor de 130 millones de euros del momento). Junto a la escudería energética, que el pasado domingo revalidó el título de campeona del mundo de pilotos de la mano de Max Verstappen, Aston Martin y Williams tampoco recibieron el certificado que acredita que el curso pasado cumplieron con la normativa, aunque la naturaleza de sus infracciones responde a la presentación fuera de plazo de la documentación (Williams), y a una cuestión de forma (Aston Martin), algo en lo que también incurrió Red Bull. La FIA, que inicialmente debía oficializar los resultados de su auditoría a finales de la semana pasada, emitió un comunicado este lunes por la tarde en el que simplemente especificaba el resultado de sus análisis, pero sin ofrecer pistas de las sanciones que se aplicarán a quienes transgredieron la barrera de gasto.

“La Administración de Contención de Gastos de la FIA está determinando las acciones que, según la Normativa Financiera del campeonato, deberán aplicarse a Aston Martin y Red Bull”, se lee en la nota del organismo que se encarga de legislar el certamen. A pesar de la ambigüedad y escasez de información, que el exceso de la marca del búfalo rojo se defina como “menor”, esto es, que no supera el 5% del total permitido, lleva a pensar que la sanción no será tan severa como podía llegar a esperarse. Por este tipo de violación del reglamento, las penalizaciones pueden ir desde una reprimenda pública a la pérdida de puntos, bien sea en la clasificación reservada a los pilotos o a la de constructores; pasando por una sanción económica, la exclusión de algún gran premio o la limitación en el uso del túnel de viento, una de las herramientas que más impacto tiene en el presupuesto de las formaciones. Al parecer, Red Bull encaró este nuevo marco económico de una forma más agresiva que la mayoría de sus rivales, con la intención de que tuviera que ser la FIA quien tuviera que justificar el exceso. Otros, sin embargo, fueron mucho más transparentes. A raíz de este caso, se espera que la FIA sea más precisa en el control del gasto, para así tratar de afinar una de las normas más invasivas de la historia reciente de la F1, que entró en vigor la última temporada. Menos de una hora después de conocerse el veredicto, Red Bull lanzaba un mensaje en el que mostraba su sorpresa. “Recibimos esa transgresión menor en el gasto estipulado en la Normativa Financiera con sorpresa y decepción. Nuestra aplicación estaba por debajo esa barrera, así que es necesario revisar detenidamente las directrices de la FIA, dado que estamos convencidos de permanecer dentro de los márgenes”, posteaba el equipo.

El runrún acerca del supuesto incumplimiento de la barrera económica se propagó a toda pastilla por el ‘paddock’ instalado hace dos semanas en Singapur. Preguntado por el rumor que apuntaba hacia Red Bull, Christian Horner, su director, afirmaba estar completamente convencido de que las finanzas de la tropa de Milton Keynes (Gran Bretaña) estaban en orden. El ejecutivo iba un poco más allá, al insinuar que todo ese ruido pretendía interferir en el curso deportivo de 2022, precisamente, cuando Verstappen tenía a su alcance la primera oportunidad para coronarse bicampeón. “No es casualidad que eso salga a la luz precisamente cuando Max tiene su primera bola de partido”, ironizaba entonces, Horner.

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