Ancelotti: “No se creen tan guapos”
El entrenador del Madrid remarca que su equipo sabe jugar de varias maneras y resalta con humor que sus jugadores mantengan la ambición por seguir conquistando títulos
Los jugadores del Athletic bajaron la cabeza al finalizar el partido porque es la tercera de las cuatro finales que han perdido en un año, aunque fueron a ofrecerle la mano a sus rivales de inmediato. “Nos falta una pizca de más, de suerte, de detalles, de saber competir con una victoria. Pero me siento muy orgulloso de mis jugadores”, señaló Marcelino. “Es muy difícil llegar a las finales. Pero peleamos con nuestra filosofía y manera de ser y por eso lo celebramos así al ganar la semifinal”, expuso Óscar de Marcos, en referen...
Los jugadores del Athletic bajaron la cabeza al finalizar el partido porque es la tercera de las cuatro finales que han perdido en un año, aunque fueron a ofrecerle la mano a sus rivales de inmediato. “Nos falta una pizca de más, de suerte, de detalles, de saber competir con una victoria. Pero me siento muy orgulloso de mis jugadores”, señaló Marcelino. “Es muy difícil llegar a las finales. Pero peleamos con nuestra filosofía y manera de ser y por eso lo celebramos así al ganar la semifinal”, expuso Óscar de Marcos, en referencia al gran festejo en el vestuario con las notas de la trompeta de Villalibre. En contraposición, solo dos jugadores del Madrid festejaron la Supercopa de una forma más animosa que cerrar los puños y levantar los brazos. Uno fue Marcelo, que se arrodilló en el suelo; el otro fue Alaba, que se abalanzó sobre Courtois.
Con el laurel conseguido en Riad, el brasileño se convirtió en el jugador blanco con más títulos en la historia (23), los mismos que Gento y uno por encima de Sanchís y Sergio Ramos. “Marcelo es un grande, una leyenda en el Madrid”, le piropeó el presidente Florentino Pérez. Minutos más tarde, después de que desfilaran los jugadores para recoger su medalla, él asió el trofeo y, delante de sus compañeros, levantó la copa al tiempo que brotaba brillantina dorada y fuegos artificiales.
El festejo de Alaba fue porque se llevó su primer título como madridista y porque Courtois había hecho una parada para las hemerotecas en el penalti que le chutó su amigo Raúl García por su pasado común en el Atlético. “No hemos podido apretarles al final porque Courtois ha sacado ese pie”, lamentó De Marcos. “Si meten ese penalti hubiesen quedado unos minutos de infarto...”, convino el portero blanco. Florentino se acordó de su guardameta. “Es el mejor portero del mundo. Como también los es Modric en su puesto, que está a un nivel digno de volver a ganar el Balón de Oro”. Modric cogió la palabra: ”Gracias al presidente. Me siento bien, disfruto como nunca”. Courtois también habló: “Muchas gracias por decirlo. Yo intento seguir cumpliendo y seguir haciendo felices a los madridistas. Ahora, a ver si vienen más títulos”.
Este no pudo llevárselo el Athletic. “El segundo gol nos ha distanciado y nos ha hecho daño”, admitió De Marcos. “¡<Rrrrrr!”, señaló Marcelino, que se mordió la lengua en varias ocasiones porque no entendió que se señalara penalti; “pero si lo ve el VAR y también el árbitro, que ha necesitado mirar la acción muchas veces... Aunque para mí no lo es”.
”Una nueva época”
La alegría corría por la casa blanca. Ancelotti sacó pecho, después de haber sido criticado por ganar a la contra al Barcelona. “Nos hemos merecido el título después de jugar dos partidos de forma distinta y bien. Esta es la fuerza de este equipo, jugamos de varias maneras”, resolvió. “Este título significa bastante porque estamos cuajando una nueva época”, convino Florentino Pérez, que pareció mandar un mensaje a Sergio Ramos; “lo hacemos con una defensa que hemos cambiado y que está dando muy buen resultado. Estamos contentos y optimistas con este nuevo rumbo que nos lleva a ganar de nuevo. Y nosotros siempre queremos ganarlo todo. Es algo que nos enseñaron desde pequeñitos”. Ancelotti recogió el testigo: “Vamos a luchar por las otras competiciones, por supuesto. Yo no estoy cansado de ganar”.
Tampoco lo están sus jugadores, según explicó el entrenador. “Cuando ganas mucho te piensas que eres el más guapo, el mejor del mundo. En estos jugadores, afortunadamente, no ha bajado el sacrificio. No se creen tan guapos”, expuso al tiempo que bromeó: “Es la verdad, son muy feos”. Modric, que todavía tiene que renovar, respondió: “Para nada me canso de ganar. De hecho, no hemos hecho nada. Hay que seguir”.
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