La ‘nacionalización’ del Barcelona
El fracaso de los extranjeros obliga al equipo azulgrana a entregarse a la cantera y a unos fichajes españoles que devuelven su protagonismo en la selección de Luis Enrique
Antes de aceptar en verano pasado que Ronald Koeman continuara momentáneamente en el banquillo del Camp Nou, Joan Laporta buscó un entrenador capaz de liderar un proyecto deportivo que le hubiera gustado confiar a Tuchel o Nagelsmann. Ambos estaban ya comprometidos con el Chelsea y el Bayern, respectivamente, y Guardiola había descartado regresar al Barça desde el City. Al presidente azulgrana le aconsejaron entonces que preguntara por Luis Enrique. El vínculo del seleccionador co...
Antes de aceptar en verano pasado que Ronald Koeman continuara momentáneamente en el banquillo del Camp Nou, Joan Laporta buscó un entrenador capaz de liderar un proyecto deportivo que le hubiera gustado confiar a Tuchel o Nagelsmann. Ambos estaban ya comprometidos con el Chelsea y el Bayern, respectivamente, y Guardiola había descartado regresar al Barça desde el City. Al presidente azulgrana le aconsejaron entonces que preguntara por Luis Enrique. El vínculo del seleccionador con la federación, sin embargo, siempre ha lo sido suficientemente fuerte como para aguantar la crítica, muy notoria cuando estaba en duda la clasificación de España para el Mundial de Qatar. El asturiano, que se mueve muy bien en la tensión, se ha sentido motivado desde que asumió el cargo por la ambición de construir un equipo que vuelva a conquistar títulos después del último ganado en 2012. El mismo reto que ahora anima a Xavi en el Barcelona, después de ser elegido finalmente por Laporta.
El fichaje de Ferran Torres refleja la sintonía entre los proyectos del entrenador azulgrana y el del seleccionador. Ferran Torres, Pedri, Gavi, Eric García, Busquets y Alba están en la órbita de Luis Enrique, las lesiones han orillado a Sergi Roberto y Ansu Fati, Piqué renunció y Nico ya ha sido convocado por la sub-21.
Los jugadores españoles son también los protagonistas en el Camp Nou, después de que los extranjeros hayan dejado de marcar las diferencias desde que se deshiciera el tridente Messi, Luis Suárez y Neymar. Aunque no se han olvidado, los ocho goles del lesionado Memphis parecen pesar menos que los marcados últimamente por Nico (2), Gavi y Jutglà, además del que anotaron el marroquí Abde en Pamplona y el uruguayo Araujo en Sevilla.
Memphis deberá compartir o competir por un puesto en la delantera con Ansu y Ferran Torres, a la espera de si renueva Dembélé. El francés especula mientras se busca una salida para Coutinho. Los dos jugadores se incorporaron a cuenta de los 222 millones ingresados por la partida de Neymar al PSG. El dinero se malgastó después de que se dilapidaran también los más de 10.000 millones de pesetas (61 millones de euros) recibidos en 2000 del Madrid por Figo.
El carrusel de fichajes extranjeros realizados sin ton ni son desde el adiós de Neymar es sobrecogedor: Semedo, Yerry Mina, Paulinho, Marlon, Malcom, Arthur, Arturo Vidal, Emerson, Murillo, Boateng, Todibo, Griezmann, Matheus, Pjanic, Trincão, Emerson y el retirado Agüero. Tampoco se han consolidado Lenglet, Dest, Neto y Braithwaite, y no cuentan para el entrenador Demir, Luuk de Jong, Coutinho y Umtiti. Incluso Frenkie de Jong, incorporado en competencia con el PSG y el Manchester City, y Ter Stegen, el portero titular en la final de Berlín en 2015, son discutidos en el Camp Nou.
Objetivo Haaland
La quimera azulgrana es poder contratar en verano a Haaland. La mayoría de los mejores equipos azulgrana han tenido a un delantero foráneo como bandera si se recuerda a Kubala, Cruyff, Maradona o Messi, sin olvidar a Ronaldinho, Ronaldo, Romario o Rivaldo. A la espera de que el club pueda rebajar la masa salarial de la plantilla y cumplir el Fair Play financiero, se impone recurrir a la cantera, fichar promesas y apostar por Ferran Torres, un delantero al que le seduce la idea de liderar el ataque azulgrana después de la competencia que tenía en el City. El valenciano aumentará la lista de internacionales españoles del Barça.
Las convocatorias de Luis Enrique estarán seguramente en la línea de las de Vicente del Bosque o incluso de Javier Clemente. Los seleccionados del Barça en el Mundial de 2010 fueron siete: Piqué, Iniesta, Xavi, Pedro, Valdés, Busquets y Puyol, y en la Eurocopa de 2012 se unió Cesc y se retiró Puyol. Los azulgrana llegaron a ser nueve en 2013 ante Nigeria — Iniesta, Valdés, Alba, Busquets, Pedro, Cesc, Piqué y Villa; se lesionó Xavi— y también en EEUU 1994. Igual de predominantes en el Mundial de 2014 (seis) y en la Eurocopa 2016 (cinco), los azulgrana no tuvieron ningún representante en la selección en octubre de 2018, cuando se enfrentó a Gales —Busquets no fue alineado—, ni en octubre de 2015 contra Ucrania. Las tornas cambiaron y hasta hace poco fue el Madrid el que no tuvo ningún jugador en las convocatorias de la Roja: desde marzo con Sergio Ramos a noviembre con Carvajal.
No había jugadores madridistas en la última Eurocopa ni en la Liga de las Naciones. Carvajal se mantiene mientras están a la expectativa Nacho y Lucas Vázquez. No hay opciones de momento para Isco ni Asensio, porque tampoco son titulares con Ancelotti.
El Madrid circula por la vía opuesta a la del Barça. La alineación está plagada de extranjeros: Courtois, Militão, Alaba, Mendy, Modric, Casemiro, Kroos, Vinicius y Benzema. Queda por cubrir el puesto de lateral derecho, asignado a Carvajal, y el del tercer delantero, al que optan varios, la mayoría extranjeros (Hazard, Rodrigo, Bale, Jovic). La cantera, que presume de jóvenes muy buenos como el hijo de Julen Guerrero, apenas tiene impacto en el equipo de Ancelotti. Alcanza con ver el protagonismo decreciente de futbolistas como Miguel Gutiérrez. La apuesta que viene se llama Mbappé, y quién sabe si también el goleador Haaland.
El aval de Guardiola
A la espera de conocer el destino del noruego, el Barcelona confía en Ferran como pieza angular del proyecto de Xavi. El futbolista de Foios ha sido elogiado a fin de cuentas por los entrenadores relacionados con el Barcelona. Ya se sabe de la querencia de Luis Enrique y no hay dudas tampoco respecto a la admiración de Guardiola. El técnico del City aseveró en agosto pasado sobre Ferran: “La temporada pasada jugó increíblemente bien, pero ahora hemos descubierto que en la posición de delantero centro sus movimientos al espacio son de los mejores, al nivel de especialistas como Vardy. Se mueve increíblemente bien, es un finalizador increíble y es muy joven. Puede ocupar las tres posiciones de ataque, siempre quiere aprender y tiene una ética de trabajo digna de elogio”, finalizó Guardiola.
Xavi también se desvive por Ferran y le gusta Vlahovic (Fiorentina). El nudo del equipo se localiza en la delantera después de la competencia que se advierte en la medular y se está a la espera de captar un central como De Ligt. El más presionado puede ser De Jong después de advertir que el juego del volante del Ajax no es posicionalmente el mismo que pretende Xavi en el Barça. No hay, en cualquier caso, tarea más delicada que recomponer el ataque sin Messi. El juego de la selección de Luis Enrique no será extraño a Xavi de la misma manera que ambos serán seguidos por Guardiola desde Mánchester. El City no para de marcar goles a pesar de jugar sin un 9 después del fichaje frustrado de Kane. Hay quien apuesta por Ferran como el sustituto de su ídolo Villa. El exvalencianista se convertirá, de momento, en el fichaje español más caro del Barcelona después de invertir 40 millones por el asturiano, fichado del Valencia en 2010.
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