Ferrari se queda sin campeones en parrilla

Con Ferrari ocurre un poco como con aquellos majestuosos clubes de fútbol que llevan tiempo embarcados en una travesía por el desierto a la espera de volver a celebrar algo gordo. Cualquier persona que no sea una entendida en Fórmula 1 seguramente alucine al caer en la cuenta de que el último título que se exhibe en las vitrinas de Maranello data de 2007. El protagonista de la hazaña fue ...

Con Ferrari ocurre un poco como con aquellos majestuosos clubes de fútbol que llevan tiempo embarcados en una travesía por el desierto a la espera de volver a celebrar algo gordo. Cualquier persona que no sea una entendida en Fórmula 1 seguramente alucine al caer en la cuenta de que el último título que se exhibe en las vitrinas de Maranello data de 2007. El protagonista de la hazaña fue Kimi Raikkonen, que, tras 19 temporadas en el Mundial, anunció este miércoles que se retirará a final de curso, el tercero enfundado en el mono de Alfa Romeo. A sus 41 años, el finlandés es el penúltimo de la generación de pilotos a la que también pertenece Fernando Alonso, quien, tras confirmar la prolongación de su contrato con Alpine para 2022, heredará la etiqueta de piloto más veterano de la parrilla.

Con el adiós de Raikkinen, Ferrari se queda sin campeones en el certamen, enfrascada como está la Scuderia en el diseño del monoplaza del año que viene, con el que confía poder darles a Carlos Sainz y Charles Leclerc un monoplaza tan competitivo como el que condujo el de Espoo en su primera etapa vestido de rojo. Al margen de aquel título que se jugó con Alonso y Lewis Hamilton, ambos compañeros en McLaren, el palmarés de Kimi refleja 21 triunfos, 103 podios, 18 pole position y 46 vueltas rápidas. Debutó al volante de un Sauber en 2001 sin demasiados honores y procedente de la Fórmula Renault, pero la sexta plaza que logró en su estreno le colocó rápidamente en el radar. Al poco tiempo, las estructuras más potentes se rifaban al último diamante en bruto, a quien McLaren le echó el lazo en 2002.

En todo este tiempo, Raikkonen ha pasado por un total de cinco equipos, en los que siempre dejó su huella particular, esa que le llevó a ganarse el podo de Iceman Hombre de Hielo, por su controvertido carácter. Estamos hablando de un enamorado de las carreras de todo tipo, que tras su primer portazo a la F1 (finales de 2009) se puso a prueba en los rallies y pasó por la Nascar, mientras daba gas sobre una moto de cross, uno de sus pasiones. “La decisión la tomé este invierno. No fue fácil, pero creo que es el momento de llevar a cabo nuevos retos”, afirmó Raikkonen en la previa del Gran Premio de Holanda que se diputa este fin de semana en Zandvoort.

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