El público vuelve a los estadios de la Liga de manera desigual

Poco a poco, los equipos, previo acuerdo con las comunidades autónomas, desvelan cómo va a volver el público a los estadios en las primeras jornadas y de nuevo hay diversidad de criterios. Los más permisivos han sido Madrid, que no tiene ningún partido de Primera en la Jornada 1, Andalucía, Galicia y las Islas Baleares, que admitirán un 40% del aforo. Por su parte, hay algunos territorios que han rebajado un poco las pretensiones de sanidad, bien reduciendo el porcentaje (el País Vasco tendrá un 20%), o con un límite al número de aficionados, Valencia permite hasta 15.000 personas.

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Poco a poco, los equipos, previo acuerdo con las comunidades autónomas, desvelan cómo va a volver el público a los estadios en las primeras jornadas y de nuevo hay diversidad de criterios. Los más permisivos han sido Madrid, que no tiene ningún partido de Primera en la Jornada 1, Andalucía, Galicia y las Islas Baleares, que admitirán un 40% del aforo. Por su parte, hay algunos territorios que han rebajado un poco las pretensiones de sanidad, bien reduciendo el porcentaje (el País Vasco tendrá un 20%), o con un límite al número de aficionados, Valencia permite hasta 15.000 personas.

Hace un año y medio el Betis y el Real Madrid jugaban el último partido de Liga donde se podía observar unas gradas a rebosar. Desde entonces, se han jugado todos los partidos a puerta cerrada, a excepción de los últimos encuentros de la pasada campaña, donde se permitieron apenas 5.000 hinchas como tope en algunos estadios situados en territorios en Fase 1. En esta edición de la competición doméstica, los aficionados podrán volver a los estadios en todo el territorio, aunque todavía queda tiempo para volver a ver fotos abarrotadas de gente celebrando los goles como las del estadio Benito Villamarín.

El pasado 24 de junio la ministra de Sanidad, Carolina Darias, tras un Consejo de Ministros extraordinario, admitió que el público iba a volver a los estadios con un 100% de capacidad. No obstante, la quinta ola del covid ha llevado al traste dicha propuesta y por el momento los clubes se tendrán que conformar con un máximo de un 40% de aforo en los campos de fútbol en Primera y Segunda División, según acordaron el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas el pasado 4 de agosto. Sin embargo, ese porcentaje es un máximo que se debe cumplir y cada región tiene la potestad de restringir aún más la presencia de público en los estadios, lo que ha llevado a una disparidad de criterios.

Madrid mostró previamente su intención de que accediera hasta un 60% del aforo, pero tendrá que amoldarse a ese 40%. En la segunda jornada se jugarán los primeros partidos en suelo madrileño y el Atlético recibirá al Elche el domingo 22, cuando recibirá cerca de 27.000 espectadores, mientras que el Getafe se las verá con el Sevilla y con opciones de que cerca de 7.000 aficionados aprieten desde la grada. Por su parte, el Real Madrid es el único que deberá esperar porque jugará los tres primeros encuentros como visitante por las obras del Santiago Bernabéu. En cuanto al Rayo Vallecano, todavía se desconoce el número de aficionados, pero no podrán exceder los 5.600.

El caso andaluz ha sido lo contrario que Madrid. Antes de que Sanidad y las comunidades aprobaran el 40% de aforo, la Junta de Andalucía mantenía un máximo del 25% de capacidad en los estadios, el mismo que se permitió en los partidos que se disputaron en el estadio de La Cartuja durante la Eurocopa. Sin embargo, el consejero de la Presidencia, Administraciones Públicas e Interior de la Junta de Andalucía, Elías Bendodo, confirmó, a falta de solo 48 horas para el inicio de la Liga, que se había llegado a un acuerdo para permitir un 40% del aforo. Así pues, al Sánchez-Pizjuán podrán entrar en torno a 17.000 espectadores, mientras que en el Benito Villamarín podrán hacerlo cerca de 25.000 béticos. Por su parte, el Granada CF, que solo pudo abrir las puertas al 25% de su afición la semana pasada en el Trofeo Ciudad de Granada, podrá ampliar el aforo, al igual que le ocurrió al Cádiz en el trofeo Ramón de Carranza contra el Atlético de Madrid.

El único equipo gallego en la primera categoría es el Celta de Vigo y recibe al Atlético en Balaídos, con algo menos de 8.000 espectadores animando en la grada. Por su parte, el Mallorca no ha escatimado en el aforo para que los máximos aficionados posibles, unos, 9.000, puedan ver la vuelta del club a la división de honor.

Los territorios más duros

La Comunidad Valenciana, por su parte, ha matizado el 40% del Gobierno y ha sumado un límite de 15.000 espectadores, lo que imposibilita al Valencia llegar al 40% real de su estadio porque serían 19.440. El Villarreal, que recibe al Granada CF en su primera intervención en esta temporada, lo hace con el estadio de La Cerámica al 40%, cogiendo únicamente a un máximo de 9.400 abonados, el Elche contará con cerca de 13.000 aficionados y el Levante con 10.500. Navarra ha realizado matizaciones en el protocolo de Sanidad y disminuye el porcentaje permitido al 33%. Una reducción que afecta a Osasuna, que en la jornada inaugural recibe al Espanyol con aproximadamente 8.000 espectadores

En el que será el primer partido del FC Barcelona sin Messi, en que se enfrentará a la Real Sociedad, el Camp Nou recibirá el 30%, que le sirve para convertirse en el estadio que más público incluya debido a sus casi 100.000 espectadores posibles, 30.000 en el debut liguero. También en Cataluña, el Espanyol apenas puede contar con unos 12.000 espectadores para recibir al vigente campeón de la Europa League, el Villarreal, en la segunda jornada de liga.

El que tiene las restricciones más duras es el País Vasco, que reducirá el aforo hasta el 20% de público. Esto afecta a tres equipos en la máxima categoría del fútbol español, así pues, el Deportivo Alavés, que recibe al Real Madrid el primer fin de semana de Liga, solo podrá contar con 3.900 seguidores en Mendizorroza; y en la segunda jornada, el Athletic solo verá a 10.600 en San Mamés y la Real, a 7.900 en Anoeta.

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