El Deportivo se proclama campeón de España juvenil tras derrotar a Barcelona y Real Madrid
El club gallego, con cinco futbolistas formados desde benjamines, es el primero que domina la categoría mientras su primer equipo está fuera del fútbol profesional
Los vericuetos del fútbol propician paradojas como la que vive el Deportivo, cuyo equipo juvenil se coronó este domingo como el mejor de España tras ganar la final de la Copa de Campeones al Barcelona (3-1). Antes había eliminado en semifinales al Real Madrid. Es la primera vez que un club con el primer equipo fuera de las dos primeras divisiones del fútbol profesional domina el escalón inferior a la edad senior.
La Copa de Campeones congrega a los ganadores de los siete grupos que integran la categoría y al mejor segu...
Los vericuetos del fútbol propician paradojas como la que vive el Deportivo, cuyo equipo juvenil se coronó este domingo como el mejor de España tras ganar la final de la Copa de Campeones al Barcelona (3-1). Antes había eliminado en semifinales al Real Madrid. Es la primera vez que un club con el primer equipo fuera de las dos primeras divisiones del fútbol profesional domina el escalón inferior a la edad senior.
La Copa de Campeones congrega a los ganadores de los siete grupos que integran la categoría y al mejor segundo. El camino del Deportivo no ha sido el más sencillo. Tras dejar atrás durante la Liga a Celta, Sporting o Racing de Santander, sus clásicos rivales, se topó en la fase eliminatoria con un gigante del fútbol base, Las Palmas, al que dominó y eliminó en la tanda de penaltis. En la fase final celebrada esta semana en Marbella laminó a los equipos representativos de la canteras más poderosas del fútbol español. En todo caso, el Barcelona no alineó a sus cuatro juveniles más lustrosos, dos de ellos, Ansu Fati y Ilaix Moriba ya forman parte del primer equipo, mientras Alejandro Balde y Nico González, hijo del exdeportivista Fran, jugaron toda la campaña con el filial en Segunda B.
Justamente el mítico diez blanquiazul Fran ejerce desde hace un año como director de la cantera deportivista. Ahora afronta el desafío de mantener los pilares de un equipo campeón en el que apenas hay futbolistas sin ofertas para salir de A Coruña. “La cantera va a ser la clave del futuro del Deportivo”, anuncia Antonio Couceiro, el actual presidente del club controlado por Abanca. Sería un cambio casi cultural en una entidad y una ciudad que vio crecer a Luis Suárez, Amancio Amaro y el propio Fran, pero en la que jamás se apostó por la base. En 1996 el Deportivo alzó también la Copa de Campeones juvenil, pero apenas dos futbolistas de aquel grupo, Dani Mallo y Deus, llegaron a alternar y de manera efímera en el primer equipo. Otros como Ramiro Amarelle tuvieron que buscar una salida en el fútbol playa. Mientras tanto, con la sentencia Bosman en la mano, el Deportivo acudía al mercado a fichar decenas de futbolistas extranjeros. En 2003 inauguró la Ciudad Deportiva de Abegondo con una promesa de convertirla en un prolífico vivero. Ocho años después se fue a Segunda con una plantilla sin futbolistas gallegos. La decepcionante pasada campaña, en Segunda B, la cumplió con apenas cinco canteranos con dorsal del primer equipo.
El triunfo le llega ahora al Deportivo de la mano de una generación dorada. La base del equipo triunfador ante Madrid y Barcelona es de segundo año juvenil, incluso uno de los titulares, Mella, está en edad cadete. Los chicos del 2003 siempre fueron algo especial en el Deportivo, la primera generación que partió desde benjamines. Dos de ellos se marcharon sin que el club pudiera retenerles. Álvaro Carreras, un lateral izquierdo, se fue al Real Madrid cuando tenía 14 años y después de tres temporadas en la casa blanca aceptó una oferta del Manchester United.
Hugo Novoa, un extremo, está en el Leipzig. Pero cinco de los futbolistas ahora campeones ha hecho todo el recorrido desde el benjamines, entre ellos el delantero Noel López, que tras marcarle dos goles al Barcelona no dudó en besar y mostrar el escudo. “Lo estáis defiendo como se merece”, les había dicho el entrenador tras derrotar al Real Madrid. El técnico Óscar Gilsanz compatibiliza su trabajo en el equipo con su labor en una empresa familiar de autobuses para la que no duda en ponerse al volante todas las mañanas en el transporte de escolares.
El deportivismo asiste entre expectante y esperanzado a este aldabonazo identitario justo en el momento futbolístico más bajo de la historia del club. Pero el salto de juvenil a senior, aunque sea para jugar en 1ªRFEF semeja delicado. Gilsanz pide que la cocción sea lenta, o por lo menos adecuada a un proceso madurativo en el que hay que valorar cada caso. Por ahora gran parte del grupo, apenas cinco habituales titulares pasan a senior, disputará la próxima temporada la Youth League, la Champions juvenil a la que acceden por los méritos de sus primeros equipos Real Madrid, Barcelona, Atlético, Sevilla y Villarreal y a la que llega, como mejor equipo español de la categoría, el Deportivo.
Puedes seguir a EL PAÍS DEPORTES en Facebook y Twitter, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.