Koeman: “Esta plantilla no es del nivel que queremos en el Barcelona”
El técnico azulgrana pone en valor su trabajo con los jóvenes al tiempo que solicita más tiempo para pulir el futuro del equipo
Hace ya unas semanas que Ronald Koeman borró la sonrisa de su cara, apesadumbrado por perder la Liga y posiblemente su silla en el banquillo del Barcelona. Siempre defendió que se veía como el entrenador azulgrana en el curso próximo, convencido y orgulloso de su trabajo. Pero desde que llegó a la presidencia Laporta -que sí le mostró su confianza pero no le dio tampoco su palabra- ya no las tiene todas consigo. Se le achaca un juego poco vistoso y fa...
Hace ya unas semanas que Ronald Koeman borró la sonrisa de su cara, apesadumbrado por perder la Liga y posiblemente su silla en el banquillo del Barcelona. Siempre defendió que se veía como el entrenador azulgrana en el curso próximo, convencido y orgulloso de su trabajo. Pero desde que llegó a la presidencia Laporta -que sí le mostró su confianza pero no le dio tampoco su palabra- ya no las tiene todas consigo. Se le achaca un juego poco vistoso y falta de recursos tácticos, por más que no le trajeron fichajes -Pjanic, a quien ha sometido a un ostracismo que sorprendía incluso al vestuario, y Dest sobre la bocina- y comenzó con Messi con el morro torcido porque no le dejaron salir del club por pedirlo fuera de plazo. Ha ganado la Copa y finaliza la Liga tercero. “Si en agosto me dicen que ganaríamos un título y lucharíamos por el campeonato hasta los dos últimos partidos… Yo, y también mucha gente, habría firmado. Así lo pienso. No es una temporada mala, ni mucho menos. No se puede pedir un doblete cada año y menos a una plantilla que estás formando”, reivindicó Koeman.
Molesto por la sucesión de informaciones que le sitúan fuera del club, Koeman hizo frente a la que quizá es su última rueda de prensa como técnico azulgrana. “Pienso que no es mi último partido. Tengo contrato. Estoy tranquilo y si hay algo que el club quiera cambiar, me tiene que hablar”, defendió el holandés, que quiso ofrecer sus argumentos: “Hemos cogido una plantilla que estaba hecha. El único fichaje fue Dest en el último día [obvió a Pjanic]. Pero para mí no estaba hecha del todo, no es el nivel que queremos en el Barça y mucha gente en el club piensa así. Hay jugadores mayores con todo el respeto, que todavía tienen nivel para este equipo. También hay muchos muy jóvenes que tienen que aprender y coger experiencia. Esta plantilla no está hecha. Por eso digo que no se puede hacer todo en una temporada”. Y remarcó: “Hemos hecho muchos cambios en la plantilla y creo que este proyecto se merece tener más tiempo”.
Pero en el Barça y en el fútbol el tiempo cada vez es más difuso y desconocido, exigidos todos los banquillos por los resultados, sobre todo en el campeonato doméstico. “Hemos tenido un periodo muy difícil en invierno y perdimos muchos puntos. Hemos estado en la lucha por el título, pero también perdimos partidos muy importantes que nos podían dar el campeonato. Es un equipo muy joven, pero creo en el futuro de este equipo y en los jugadores jóvenes que hemos descubierto. Puede ser un año positivo”, expuso Koeman, a todas luces disconforme con quienes no creen en su continuidad. “El problema existía al inicio porque tuvimos que remontar muchos puntos y hasta ganamos la Copa de una manera brillante. Pero hemos perdonado en los partidos importantes, como ante el Granada que nos pudimos poner líderes”, lamentó. Así lo vio Griezmann: “Nuestra imagen no fue muy buena al principio de temporada y perdimos muchos puntos. Pero en 2021 lo hemos hecho casi perfecto menos en los partidos claves en los que se decidían la Liga, como el Madrid, el Atlético y creo que ante el Granada, que es cuando perdimos el torneo. Estamos dolidos y decepcionados por perder esta Liga”.
Se la llevó el equipo de Simeone. “El Atlético se ha merecido ganar el campeonato. Tiene una plantilla muy bien hecha y han estado mucho tiempo arriba. Ha estado un poco mejor que el Madrid y el Barça”, aceptó Koeman. Ahora queda por ver qué sucede con el técnico, también con un vestuario al que se le adivina una nueva limpia en cuanto a jugadores y sobre todo coste de la masa salarial. Pero para este año, se acabó lo que se daba.
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