Espléndida Muguruza
La hispanovenezolana apea de Roma a la jugadora más en forma del circuito, Azarenka (3-6, 6-3 y 6-4), y encara en las semifinales a la rumana Halep. Djokovic vuelve a sufrir, pero acaba venciendo a Koepfer
Enfila Roma su recta final, aparece poco a poco la silueta de París en el horizonte y Garbiñe Muguruza empieza a enseñar esos colmillos que le salen cuando la cosa se pone interesante y tiene un gran aliciente por delante. Lo es Roland Garros, a dos semanas vista, y por eso la hispanovenezolana se dispara y afila su raqueta cuando lo exige el presente. Este sábado le correspondía un durísimo cruce con Victoria Azarenka, reciente finalista en el US Open de Nueva York, y pese al estado de gracia de la bielorr...
Enfila Roma su recta final, aparece poco a poco la silueta de París en el horizonte y Garbiñe Muguruza empieza a enseñar esos colmillos que le salen cuando la cosa se pone interesante y tiene un gran aliciente por delante. Lo es Roland Garros, a dos semanas vista, y por eso la hispanovenezolana se dispara y afila su raqueta cuando lo exige el presente. Este sábado le correspondía un durísimo cruce con Victoria Azarenka, reciente finalista en el US Open de Nueva York, y pese al estado de gracia de la bielorrusa y su arranque fulminante, Muguruza acabó rehaciéndose a base de pundonor: 3-6, 6-3 y 6-4, después de 2h 20m.
Arrancó la tarde de mala manera, porque Azarenka encontró ese ritmo y ese peloteo tan estupendo que arrastra desde que se reanudase el circuito y la anuló en el primer parcial. Gobernaba Vika a placer, cómoda y poderosa, mientras que a Muguruza le costaba entrar en el partido y no encontraba una sola rendija. Espesa a la hora de interpretar los golpes y algo lenta de piernas, despertó al conceder la primera manga y se propuso el reto de revolcar a la jugadora más en forma del momento. Y del propósito al hecho.
Su cabeza hizo click, su tenis se revitalizó y planteó un cuerpo a cuerpo sin medias tintas. Ambas se enzarzaron en un espectacular toma y daca que desembocó en un intenso intercambio de golpes: de break a break, un tuya mía saldado con 12 roturas y una dosis más de agresividad por parte de Muguruza. Se mantuvo esta firme en el instante más crítico del pulso, con 4-3 y bola de break a favor de la rival, y finalmente se adjudicó el premio. Le arrebató el saque por última vez y se ganó el billete para las semifinales.
Serán las terceras que dispute en el Foro Olímpico de Roma, tras las de 2016 y 2017, y las terceras también que juegue esta temporada al haber alcanzado la penúltima ronda de Shenzhen y la final del Open de Australia. Trabaja, persiste y gana consistencia Muguruza, que afrontará este domingo (12.00, DAZN) a todo un hueso, Simona Halep. La rumana, ausente en la gira norteamericana, llegará más fresca gracias a la retirada de Yulia Putintseva con 6-2 y 2-0 en el marcador.
“Busco este tipo de partidos”
“Ha sido un partido muy bueno por ambos lados. Ella venía en racha, así que he tenido que sacar mi mejor tenis. Al final, busco este tipo de partidos porque llevo bastante tiempo sin competir. He esperado mi oportunidad y he estado detrás de ella hasta que he podido darle la vuelta. Creo que estoy jugando bien en cada partido y luchando hasta el final, y además tengo un gran equipo. Todo eso está contribuyendo a que llegue a las últimas rondas”, cerró la hispanovenezolana, que en el torneo italiano había dejado atrás previamente a jugadoras de peso como Sloane Stephens, Coco Gauff y Johanna Konta. En el otro cruce se enfrentarán Karolina Pliskova (6-3, 3-6 y 6-0 a Elise Mertens) y Marketa Vondrousova (6-3 y 6-0 a Elina Svitolina).
Por otra parte, Novak Djokovic volvió a sufrir. El número uno, que pagó el nerviosismo con una de sus raquetas, sigue progresando a trompicones y este sábado le costó tumbar al alemán Dominik Koepfler (6-3, 4-6 y 6-3). Se medirá al mediodía (no antes de las 14.00, Movistar Deportes) al noruego Casper Ruud (4-6, 6-3 y 7-6 a Matteo Berrettini) por una plaza en la final del lunes. Cabe recordar que este año el torneo romano se resolverá un día más tarde de lo habitual, dado que el evento se ha solapado con el US Open como consecuencia de la reorganización del calendario.