Alisson Becker se convierte en la pesadilla del Barcelona

El portero del Liverpool participó con la Roma en la remontada que dejó fuera de las semifinales a los azulgrana en la última Champions

Alisson Becker celebra la victoria del Liverpool sobre el Barcelona.OLI SCARFF (AFP)

Alisson Ramses Becker vivió ayer en Anfield un déjà vu. Puede, incluso, que durante los minutos finales perdiera la noción de la camiseta que llevaba puesta. No era la primera vez que vivía una remontada semejante contra el Barcelona.

La temporada pasada, con la Roma, ya lo hizo. Fue en el Olímpico, con un 4-1 en contra después del partido de ida de los cuartos de final de la Champions en el Camp Nou. ...

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Alisson Ramses Becker vivió ayer en Anfield un déjà vu. Puede, incluso, que durante los minutos finales perdiera la noción de la camiseta que llevaba puesta. No era la primera vez que vivía una remontada semejante contra el Barcelona.

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La temporada pasada, con la Roma, ya lo hizo. Fue en el Olímpico, con un 4-1 en contra después del partido de ida de los cuartos de final de la Champions en el Camp Nou. Aquella noche Manolas, en el minuto 82 de partido, marcó de cabeza el 3-0 que daba la vuelta a la eliminatoria, y dejaba a los azulgrana fuera de la competición. Ocurrió un 10 de abril, y ya se ha cumplido un año de un episodio que para Becker no sería el último. En Anfield hubo un ganador, el Liverpool en su conjunto, pero de entre todos ellos solo un protagonista lo vivió con menos incredulidad que el resto. Y fue un portero, por el que el Liverpool desembolsó 70 millones de euros a la Roma en una operación que rompió la lógica del mercado (después llegarían los 80 que pagó el Chelsea por Kepa para superar ese récord), el que desde la posición más desguarnecida que existe sobre un terreno de juego abrió un nuevo capítulo en su historia.

A pesar de lo que reflejó el marcador, el portero brasileño de 26 años, internacional y titular con La Canarinha en el último Mundial, tuvo bastante trabajo durante el encuentro. Coutinho, con un disparo raso y colocado con el marcador aún a cero, Jordi Alba después, e incluso Luis Suárez exigieron que desplegase ese corpachón de 191 centímetros de estatura en varias ocasiones. Según los datos que ofreció la UEFA tras el encuentro, el Barcelona remató en ocho ocasiones, y cinco de ellas a portería. En todas ellas se encontró con Alisson, que ya contabiliza 38 paradas en este torneo, 26 centros despejados, y un porcentaje de 84% de acierto en el pase.

Su actuación fue determinante para evitar que el Barcelona marcase un gol que hubiera dificultado muchísimo la remontada de un Liverpool exultante. "De haber sabido que era tan bueno hubiéramos pagado más por él", ha llegado a asegurar Klopp sobre Alisson. Su consistencia bajo palos, que ha llevado a un histórico de la portería de Brasil como Cláudio Taffarel a bautizarlo como "El Pelé de la portería", sostuvo a un Liverpool que por segundo año consecutivo disputará la final de la Liga de Campeones. Será el próximo 1 de junio en el Wanda Metropolitano. El sueño de ganar la orejona es nuevo para Alisson. De eso no tiene recuerdos, pero de cómo conseguir gestas sí que sabe mucho. Y de cómo amargarle la vida al Barcelona, también.

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