El Everest en un mes para Barcelona y Madrid

Las semifinales coperas completan un calendario muy exigente junto a LaLiga y la Champions

Pique remata el balón durante el último clásico ligueroDavid Ramos (Getty Images)

Tres clásicos en un mes, dos Madrid-Barça en cuatro días, los octavos de la Champions, un derbi madrileño en el Metropolitano y los azulgrana de visita en San Mamés y el Pizjuán. El emparejamiento ayer de los dos grandes en las semifinales de la Copa —Betis y Valencia se juegan la otra plaza en la final del Villamarín del 25 de mayo— ha confeccionado un calendario himalayesco para los gigantes del fútbol español. Sin pausa desde que este próximo miércoles a las 21.00 se dispute la ida copera en el Camp Nou....

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Tres clásicos en un mes, dos Madrid-Barça en cuatro días, los octavos de la Champions, un derbi madrileño en el Metropolitano y los azulgrana de visita en San Mamés y el Pizjuán. El emparejamiento ayer de los dos grandes en las semifinales de la Copa —Betis y Valencia se juegan la otra plaza en la final del Villamarín del 25 de mayo— ha confeccionado un calendario himalayesco para los gigantes del fútbol español. Sin pausa desde que este próximo miércoles a las 21.00 se dispute la ida copera en el Camp Nou.

Más información

"Veo una eliminatoria igualada", dijo ayer el preparador barcelonista, Ernesto Valverde. "En LaLiga, ellos venían en un momento complicado en lo anímico, pero ahora están mejor, con confianza y sacando resultados. Quizá está en uno de los mejores momentos de la temporada". El doble clásico ha alterado los planes del Barcelona, que no tenía pensado darle tanta relevancia a la Copa —para no acusar la sobrecarga de minutos en Europa o en la competición doméstica—, pero al que la remontada ante el Sevilla (6-1) y el emparejamiento con el Madrid han cambiado la mirada hacia el torneo.

La tesis de Valverde sobre la capacidad de respuesta de sus jugadores se sustenta por sí sola. Solo hay que mirar los envites ligueros contra los tres inmediatos perseguidores en la tabla de este curso y el anterior; frente al Madrid —sin contar la Supercopa de España del año anterior, recién aterrizado Valverde y con las maletas en la mano Neymar— suma dos triunfos y un empate; contra el Sevilla, dos victorias y el éxito actual de los cuartos coperos; ante el Atlético se queda en una alegría y dos tablas; y contra el Valencia (cuarto en la pasada campaña), firmó tres triunfos y un empate, incluida el pase de la Copa.

Con 30 galardones, siete más que el Athletic, segundo en la clasificación de laureles, el Barça ha gobernado con puño de hierro las ediciones postreras de la Copa, al punto de que se ha coronado en las últimas cuatro. Lo que le hace sumar 23 eliminatorias consecutivas sin perder (el último batacazo se lo dio ante los blancos en las semifinales de 2013), por más que sí cayera en la final de 2014, de nuevo frente al Madrid. "Es una gran eliminatoria, con dos grandes partidos que vienen en un momento en el que los dos equipos estamos inmersos en la lucha por LaLiga y también vamos a comenzar la Champions en pocas semanas...", reflexionó Valverde, que sumó ayer un contratiempo importante: su portero titular en la Copa, Cillessen, estará de baja seis semanas por una rotura muscular en el sóleo derecho. "El calendario ya está sobrecargado de por sí y sé que estos partidos tienen un desgaste especial. Es brutal. El calendario es fortísimo", añadió Valverde.

El careo en semifinales de la Copa hace recordar la tensión entre 2010 y 2014. El capricho del azar en Copa y Champions multiplicó el número de citas entre ambos: cuatro entre abril y mayo de 2011, dos en enero de 2012 y otros tres en poco más de un mes en 2013. Un periodo de tensión desmedida, con José Mourinho elevando al máximo la hostilidad desde Chamartín y Pep Guardiola primero y Tito Vilanova después a los mandos en el Camp Nou, que se abrió y cerró en el mismo escenario y de la misma manera: dos finales coperas en Mestalla y dos descorches para el Real.

EL CALENDARIO DEL PRÓXIMO MES

Fuente: elaboración propia.

La rueda vuelve ahora. Atraído de nuevo por la Copa, competición en la que estrenó Solari y cogieron carrerilla algunos de los secundarios elevados ya a la categoría de protagonistas como Llorente, Lucas y Vinicius, el Madrid tiene ante sí una prueba de fuego. Para alivio de Solari, lo afrontarán los blancos con la enfermería vacía de inicio y con el equipo alcanzando su mejor versión de juego y efectividad de la temporada.

Al choque del miércoles en el Camp Nou le seguirá el derbi liguero en el Wanda el sábado. A 10 puntos del liderato, un tropiezo ante el Atlético casi finiquitaría cualquier mínima posibilidad de pelear por el título. De la Copa a LaLiga, y de LaLiga a la Champions, su reto prioritario. Otro año más descolgados de la competición liguera a las primeras de cambio, Europa se le vuelve a presentar como una obligación a este Madrid, que abrirá la eliminatoria de octavos ante el Ajax en Ámsterdam solo siete días después de visitar Barcelona.

Después el calendario dará una mínima tregua a los chicos de Solari. Regresarán al Bernabéu el 17 de febrero para medirse al Girona y, sin compromisos entre semana, visitarán al Levante antes de cerrar los cruces de Copa y Champions con dos duelos seguidos ante el Barcelona en Chamartín. El primero, la vuelta de las semifinales coperas, el 27 de febrero; el segundo, este de LaLiga, será tres días después. Concluido el carrusel de clásicos, la visita del Ajax pondrá el punto final al todo o nada que afronta el Madrid.

Más información

Archivado En