Dembélé: “El mercado se ha vuelto loco, no presto atención a estas cantidades”

El verano se le está haciendo muy largo al FC Barcelona. Tanto como la espera por Dembélé. El nombre del francés fue uno de los primeros que sonó para reforzar el equipo de Ernesto Valverde; sin embargo, después de unas duras negociaciones con el Borussia Dortmund, su fichaje se hizo oficial el viernes de la semana pasada, a cambio de 105 millones de euros fijos, más 42 en variables (mitad por rendimiento colectivo; mitad, por individual). Cuando parecía que la llegada de Dembélé no se podía estirar más, esta mañana surgió un...

El verano se le está haciendo muy largo al FC Barcelona. Tanto como la espera por Dembélé. El nombre del francés fue uno de los primeros que sonó para reforzar el equipo de Ernesto Valverde; sin embargo, después de unas duras negociaciones con el Borussia Dortmund, su fichaje se hizo oficial el viernes de la semana pasada, a cambio de 105 millones de euros fijos, más 42 en variables (mitad por rendimiento colectivo; mitad, por individual). Cuando parecía que la llegada de Dembélé no se podía estirar más, esta mañana surgió un último momento entre el Borussia Dortmund y el extremo, por un contratiempo burocrático en la liquidación de su vínculo. Un inconveniente que prolongó la firma del contrato del francés y su presentación en sociedad como nuevo jugador azulgrana. La espera impacientó a los 17.814 aficionados que aguardaban en el Camp Nou, pañuelos blancos y el grito de “Bartomeu dimisión”.

Se auguraba un día de alegría en el Barça: se presentaba al segundo futbolista más caro de la historia del fútbol, solo lo supera Neymar, que le costó al PSG 222 millones. Sin embargo, los aficionados pasaron de la ilusión al disgusto. Un desánimo que hasta contagió a los muchos turistas que aguardaban, expectantes, por Dembélé. Después de más de una hora de espera, el francés compareció en el Camp Nou. “Es un jugador que seguíamos desde hace tiempo”, explicó Bartomeu. El Barça estuvo cerca de ficharlo la campaña pasada por 15 millones de euros, pero la operación no se concretó. “En ese momento, el jugador pensó que su evolución en otro equipo iba a ser mejor. Él quería minutos y en el Barça eso era difícil”, explicó Robert Fernández, secretario técnico azulgrana. Hoy, sin Neymar, a Dembélé se le esfumaron las dudas. Tenía tantas ganas de llegar al Camp Nou, que hasta se plantó en rebeldía contra el Borussia. “Sabía que iba a firmar por el Barça. Este periodo no fue complicado, sino delicado”, aseguró el francés.

“Estoy muy contento de estar aquí. Se ha cumplido uno de mis sueños. Mi objetivo es integrarme bien en el equipo y ganar el máximo de títulos posibles”, aseguró el francés, arropado por su madre, sus tíos, su hermano y su representante. Llevará el 11 y llega para reemplazar a Neymar. Pero Dembélé quiere regatear a la presión. “No estoy aquí para reemplazarlo. Hay una gran diferencia entre Neymar y yo. Él es un gran jugador y yo soy muy joven. Tengo 20 años y es mi segunda temporada como profesional”, dice. Y tampoco le asusta el precio que el Barcelona pagó por él. “No me pone presión. Es el mercado de fichajes que se ha vuelto loco. Yo no presto atención a estas cantidades”.

Tranquilo, muy serio, Dembélé solo sonrió cuando le preguntaron por su mote: el mosquito. “No sé porque me llaman así. Habría que preguntarle a Umtiti que fue el que me lo puso”. Por supuesto, el francés no se olvidó de piropear a Messi. “Es un honor y un placer tener en el equipo a Messi. Quiero aprender, quiero ver lo que hace fuera y dentro del campo. Es el mejor de la historia y estoy contento de evolucionar en su equipo”, subrayó el cuarto refuerzo del Barcelona. “Esperamos cerrar uno o dos fichajes más”, concluyó Fernández.